Thamar
Vivir al filo de matarse
no es casi nunca un acto de la voluntad.
Es resultado de un mundo misógino.
Nombra los suicidios: no fueron ellas
las excesivas, fue la brutalidad
de la violencia y la ceguera patriarcal.
Si tú has tenido que matarte, yo voy a seguir
intentándolo,
voy a estar aquí, conteniéndote,
conteniendo a todas las personas
que no pudieron resistir más.
Voy a nombrarlo todo, y a vivir
como si este mundo no existiese.