DISTORSIÓN Y PATRIARCADO. El sistema sexo-género patriarcal ha distorsionado la percepción de lo que es una persona y de lo que puede ser, constriñendo y obstaculizando el desarrollo de la especie, que podría ser capaz de crear un mundo de justicia, solidaridad y libertad, es decir, donde las cuestiones se resolverían a través del uso de la racionalidad empática que no puede nunca justificar al “soluciones” primitivas que ofrece la violencia y este Sistema de violencia.
Category: Libro del Bien
MARY WOLLSTONECRAFT. “Da la impresión de que los hombres, en general, emplean la razón para justificar prejuicios que han asimilado (sin alcanzar siquiera a plantearse cómo ha podido darse este hecho) en lugar de para superarlos. La mente tiene que ser fuerte para, con resolución, poder formar sus propios principios [ideales e ideas] allí donde prevalece una suerte de cobardía intelectual que hace que muchos hombres se sientan pequeños ante la tarea y la eviten, o sólo la emprendan a medias. Y sus conclusiones imperfectas aparecen como verosímiles porque se construyen sobre parte de la experiencia, y se razona desde ahí, pero esto no borra la existencia del hecho de que se trata de perspectivas limitadas [y desde aquí es cómo vemos que se produce la distorsión].” (trad. mía: soy fiel a la autora pero tengo en cuenta el paso de más de dos siglos para actualizar algunas ideas)
“Men, in general, seem to employ their reason to justify prejudices, which they have imbibed, they can scarcely trace how, rather than to root them out. The mind must be strong that resolutely forms its own principles; for a kind of intellectual cowardice prevails which makes many men shrink from the task, or only do it by haves. Yet the imperfect conclusions thus drawn, are frequently very plausible, because they are built on partial experience, on just, though narrow, views.” (Ch. 1, AVOTROW)
— más alante:
P12: … till truth is lost in a mist of words, virtue, in forms, and knowledge rendered a sounding nothing, by the specious prejudices that assume its name.
TRAD.: al punto de que lo verdadero se pierde en la densa niebla de esas palabras, la virtud en las formas, y el conocimiento queda reducido a una nada sonora, porque los prejuicios distorsionantes han usurpado su nombre.
SIGNIFICADO DE LA VIOLACIÓN E HISTORIA DE LAS MUJERES. Habría que plantearse por qué a lo largo de la historia no escrita o distorsionada de las sociedades patriarcales el Hombre ha tenido que violar a las mujeres (presentado como “seducir” o “tomar lo que su condición le da derecho a imponer”) en el matrimonio patriarcal y fuera de él, porque quizá las mujeres siempre se rebelaron ante el papel de ser sumisas sirvientas. Quizá la violación no demuestre –como repite el Sistema hasta la náusea- que el Hombre tiene necesidades biológicas que hay que (ayudarle a) colmar (ofreciéndote de buen grado aunque no quieras o para cumplir con tu deber de sirvienta del líder de la especie), sino una situación de opresión combatida continuamente por las mujeres.
AVISO. Aunque mi cuerpo sea de apoyo, mi mente no concuerda: no tengo ningún respeto por las personas cobardes (que para quien quiera leer lo que no quiere decir significa: «no voy a seguir su juego, a mí no me engañan, ni me marean, ya»). Tiranizan como las personas arrastradas por la violencia. Dan más cancha que éstas para que te acerques y ayudes, pero deberían levantarse solas. Identificar bien las cosas.
FEMINISMO. Estoy pensando que el feminismo es en realidad una posibilidad de intentar pensar fuera de un mundo mental, el patriarcal, que creemos absoluto, único y real. Quizá por eso nos suena mal o sospechoso que pueda haber una mujer de derechas diciendo que es feminista, o que se crea que «igualdad» es una noción crucial…
Quizá si me llega la inspiración, pueda escribir algo sobre «La ideología patriarcal» o bien «Cómo la cultura patriarcal condiciona nuestro pensamiento» y pasártelo, M, y vemos si escribir algo juntas o por separado o lo que sea!
LA LUCHA POR TU PERSONA NO PATRIARCAL. Una de las razones por las que yo he dejado de “pelearme” con la gente en foros y demás (bueno, los foros de discusión de ideas desaparecieron cuando la gente prefirió las redes sociales, y es una pena) es por eso, 2º porque es violento, es un “pelearte” de verdad, no “argumentar y contraargumentar” (si no se sabe, enseguida se ve si la persona quiere llegar a eso o no) y 1º porque tú te construyes con un esfuerzo salvaje y grande, como la persona que te gustaría llegar a ser, y en un segundo de “proceso social patriarcal” es como la visita a casa de tus padres, un arrasarte al pasado, a como que no hubiera pasado nada en tu vida, un arrasarte en un segundo tu castillo de naipes, pues saca de ti todo lo que no deseas ser. Y además, para qué. Todo se confirma. El Gran Orden se confirma. Todo a su lugar, díscola. Todo para que vuelvas al redil de ser persona patriarcal, que uses los modos que manda la tradición, aunque los adaptes. Por eso prefiero escribir, y discutir temas sólo con personas valientes (que no temen aprender) y generosas (que no tienen el ego tan grande que siempre es más importante que las ideas que se exploran). El resto, serán adorables si lo son. Lo cierto es que la gente no se da cuenta de que lo que creen suyo propio, de su identidad, es algo cultural compartido con muchas personas. Digo del grupo que confirma el orden prevalente. Luego estamos las personas que no lo confirman, pero que podríamos reproducirlo igual porque somos hijas de la misma cultura, y a veces lo hacemos, de hecho. Pero si gente de 1ºESO (primero de la secundaria) puede entender que que la profe te critique el cuaderno es algo muy positivo, que te sirve mucho, pienso yo que todo elmundo debería limpiarse así la mirada, para poder ver más y aprender! Al menos sumarse a esa lucha!
DEBATE DE LA TELE 2. Joder, la representante feminista (una periodista) dice que un piropo no es machista. Qué pesadez. No se entiende esto, tan sencillo: es falta de respecto evaluar el cuerpo de las mujeres en la calle, cuando no las conoces de nada. Dice también, como con pesar, que está desapareciendo la costumbre. Será porque ya no somos tan guapas, o porque los hombres se están haciendo gay. (Practicando la ironía, que se me da mal: qué tal me ha quedado?)
DEBATE DE LA TELE 3. UN PIROPO NO ES ALGO QUE TE DICE QUIEN TE AMA. A ESO SE LLAMA EXPRESAR EL AFECTO. El piropo no es algo que te dice quien te conoce y te quiere. Es algo que te dice un tío que no te conoce y construye su machismo usándote públicamente para evaluar tu cuerpo. Por eso lo común es aludir a tu culo, tu chocho o tus tetas. Pero si alguien que te aprecia te dice: «Qué guapa eres» «Qué gran persona» o lo que sea, a eso no se le llama «piropo». Es expresión del afecto. Es decirte algo bonito. Las feministas no estamos contra esto, sino contra lo machista y misógino.
http://www.mujerpalabra.net/pensamiento/analisisfeminista/pirops.htm
8 MARZO. CONMEMORAR O CELEBRAR? Sospechad de todas las preguntas con «o»?!! La ideología patriarcal siempre saliéndonos. La fecha es un momento de conmemoración y celebración de la lucha feminista, pienso. Que naciera de un evento histórico trágico igual de trágico que la situación de las mujeres en las sociedades patriarcales del planeta es algo jodido y terrible. Pero a la vez que no olvidar y también que luchar por romper el Orden (patriarcal) para alcanzar la Justicia (racionalidad empática en un mundo verdaderamente civilizado) celebramos la fuerza de la lucha y los progresos porque sabemos que muchas luchas no han sido registradas y por tanto no están en nuestra consciencia; y el que los logros (que sí hay que celebrar, pues son impresionantes dada la variada y extrema violencia enfrentada en todos los ámbitos) no hacen que nos olvidemos que vivimos en un mundo patriarcal donde la inmensa mayoría sufre por este propio sistema, por su violencia terrible a las identidades posibles en la especie! No tenemos por qué aceptar el mandato patriarcal de los binomios que se enfrentan para someterse. Podemos convivir con las dos ideas, pienso! Tenemos inteligencia sobrada para entender cosas diversas sin tener que distorsionarlas para que encajen en un Sistema de Orden donde los bandos se enfrentan para ver quién Vence y quién será Objeto Explotado.
Sí hay motivo para encontrarse y celebrar, y eso no quiere decir que se olvide a quien no lo tiene. Justamente celebramos y luchamos. Y luchando vivimos y celebramos también.
SOSPECHAR Y APRENDER A PREGUNTAR. Hay algo que siempre echo de menos en las miradas críticas, y es un rebelarse ante ciertos condicionamientos patriarcales, los referidos a conceptos y actitudes ante cosas que hacemos y decimos en el activismo. Pienso que es importante sospechar, entendiendo esto como hacerse preguntas sobre la intención subyacente y el hecho conceptual o verbal o de acción mismo, pero que hay que estar alerta también para limpiarse la mirada y saber indagar con más profundidad, hacer preguntas, porque quizá no lo sabemos bien o no lo hemos entendido de la manera más constructiva posible. Yo no puedo creer que nadie pueda pensar algo correctamente, porque entre otras cosas no sé qué es correctamente, y por tanto, siempre tiendo a esforzarme por partir de Preguntar antes de Juzgar. Y plantear el pero desde el no haber despreciado lo que en principio sospecho que debo criticar. (Aclaro que digo lo que intento hacer, no que siempre me salga.) En el movimiento social, encuentro pues mucho condicionamiento dogmático o “cristiano” que digo yo, desde esa noción de que “los cristianos evangelizaban”, es decir, salían a difundir su Verdad. Disentir desde el razonamiento empático sería diferente, sería dejar ese margen para caminar en los pies de lo que se critica (o de quien se critica). Y daría igual la respuesta, es decir, incluso que se verificara que se tiene razón, porque una cosa que yo creo que deberíamos empezar a hacer masivamente es usar la crítica desde otro enfoque: para rescatar lo que sirve, y no estar siempre partiendo de cero o cayendo en la trampa de los binomios contendientes de la perpetua guerra conceptual patriarcal, tan maniquea. Aquí por ejemplo, en la inteligencia feminista se practica mucho esto, pues la cultura que se cuestiona y critica (con la vida propia y toda, entera) te constituye y lo que te diferencia es sólo que puedes imaginar transformar esos procesos. Bueno, no sé si me explico. Pero habría más progreso si en lugar de usar la crítica, la lucidez, para “destruir al contrario” pudiéramos usarla para construir conjuntamente, sin exclusiones que pienso que no llevan más que a la perpetuación de lo aprendido, esa guerra. Esto es pensar desde la noviolencia y el feminismo para mí. Y por eso pienso que sin esos elementos no puede haber una transformación social que realmente empuje con más fuerza para la superación de un Sistema brutal.
PROFE, PROFEEE, CRITÍCAME EL CUADERNOOO. Hoy he visto a gente con la trabajé cuando fui profe de secundaria en la pública. Mucha ilusión. Emoticono heart Pues bien, me preguntaron si había cambiado, respecto a ser tan «no sé qué» y yo, que no sé interpretar bien mensajes vagos o con mensaje no explícito, dije que no (interpreté bien, creo), que ahora era igual sólo que hacía todo mejor. Emoticono smile Emoticono wink Nos reímos. Yo no sé qué imagen tendrán, ni qué cosas pasaron. Pero quizá esta anécdota ilustre. Cuando pasaron a la gente del último curso de primaria a la secundaria, como profe de secundaria vi que no sabían ser de secundaria: venían con hábitos de aprendizaje dirigido y no sabían lo de tomar apuntes. Así que aunque yo era de idiomas (o sea, no sólo en Tutorías), me propuse enseñarles algo tan vital como a tomar apuntes, es decir, ser independientes, desarrollar criterio! Emoticono grin Emoticono heart, y no sé bien cómo lo hice, pero echaban todo su esfuerzo e inteligencia e ilusión en hacerme el cuaderno, al menos en uno de los 24 instis donde trabajé! (donde también organicé talleres que daba esta gente de 1ºESO en su propio grupo sobre algo que supieran hacer muy bien!) Creo que sabían que esto de «tomar apuntes» era algo de «ser mayor», y como no daba abasto a hacer orales, proyectos, exámenes impuestos, y encima cuadernos, a veces salía del aula sin haber mirado todos los cuadernos. Por eso me perseguían por los pasillos gritando aquello: Profe, critícame el cuaderno. Emoticono heart Emoticono heart Emoticono heart
No es posible desde la humanidad o el uso real de la mente-corazón, que llamamos inteligencia. No es amor, es sumisión a un sistema de violencia. Intentaré explicarlo.
El ser mujer y hombre según las nociones que de esto ha establecido el patriarcado, las sociedades patriarcales, primero con los “libros sagrados”, y hasta el siglo veinte usando todo lo posible para reforzarlas incluida las costumbres y la ciencia, le ha supuesto a la especie humana una renuncia al uso de la inteligencia y una limitación y distorsión de la propia inteligencia, violencia ejercida contra la persona misma por ella misma, y por la sociedad y sus consensos.
Que una persona (a) pueda concebir que puede tener sentimientos de amor hacia otra persona (b) que no siente ni el respeto mínimo hacia ella (a) va en contra de todo lo que la inteligencia humana, liberada del dogmatismo patriarcal, podría desear y lograr, porque va contra (1) la posibilidad de supervivencia, (2) la posibilidad de construcción de relaciones sociales (que tanto necesitamos porque somos animales sociales), y por tanto contra (3) la posibilidad de felicidad. El querer estar con personas que te hacen daño no es ni natural, ni biológico, ni una realidad humana, sino producto de una educación violenta ideológica que pretende crear sociedades donde haya muchas personas que acepten recibir violencia.
Que el patriarcado es un sistema con especial odio a las mujeres, aunque obviamente sus demenciales concepciones del sistema sexo-género humillen también al resto, lo demuestra este caso que empleo para ilustrar. Y por eso hay tantas mujeres atrapadas en relaciones humillantes y con más tipos de violencia. Y mantenerse en ellas no las va a ayudar a superar la tara en el uso de una inteligencia empática (también hacia ellas mismas) que las proporcionaría una vida muy diferente.
Por dignidad, por rescatar nuestra inteligencia y humanidad, es fundamental pensar, pensar desde la inteligencia feminista, que es la que puede ayudarnos a identificar qué cosas de la sociedad y la cultura no nos son en realidad tan “naturales” y sí nos están impidiendo desarrollar nuestro potencial humano.
RELACIONES INTERESPECIES. Ayer paseaba para despejarme de la semana de intenso trabajo, y paré en una terraza a tomarme una cerveza y un poco de ensaladilla. Un gorrión gordito se me puso delante, sobre la mesa, ante la ensaladilla. Así que estaba claro. Tomé un poco y se lo ofrecí. Y lo tomó de mis dedos! <3 Luego vinieron más. Estuve ahí, con la sorprendente compañía, compartiendo la tapa. Un lugar en el mundo. 🙂
MANUAL QUÉ ES VIOLENCIA (1). MENTIR puede ser pura violencia (p.e., cuando se engaña o se distorsiona la realidad para hacer daño a las personas). EL SILENCIO puede ser pura violencia (p.e., cuando no se hace nada frente a la violencia del abuso y la distorsión). MANTENER EL ORDEN puede ser violencia extrema (p.e., cuando se trata de un orden injusto o basado en la violencia). Por otro lado, ALZAR LA VOZ puede no ser violencia (p.e., cuando sistemáticamente se hace como que no se oye, o directamente no se escucha, y se está hablando desde la racionalidad empática). ALZAR LA VOZ puede ser un noble y generoso ejemplo de Lucha Noviolenta. ALZAR LA VOZ puede ser la esperanza de transformación positiva hacia la justicia social.
A gran velocidad: ARTISTAS EN EL PATRIARCADO. Marga Gil Roësset. Sale en las noticias que un profesor ha escrito sobre ella. Se presenta todo centrado en su suicidio por amor por Juan Ramón Jiménez, claro. No en su vida con fin y todo, sino en su suicidio por amor, de histérica. (Oigo a un hombre con inteligencia feminista que dice: «Ahora ellos prefieren matarlas»). Era artista, de una familia llena de mujeres artistas, que no aparecen en los libros de texto cuando estudias la poesía de la Generación del 27, el arte que se hacía entonces. Dicen que tenía «alguna escultura y unos dibujos», alguna ocupación en la vida, nada significativa para el mundo de la cultura, no una obra con un significado para la cultura (patriarcal, constituida sólo por genios), se desprende, para justificar la omisión histórica de siempre a todo lo que hagan las mujeres en especial en relación con el mundo del pensamiento, la investigación y el arte.
En una exposición dedicada a Hilma af Klint, en Málaga 2013-14 (sólo se han hecho tres en el mundo), aprendí que fue una percusora [la máquina correctora me lo cambia a masculino, no me deja el femenino] del arte abstracto pero como en la época, incluso en Suecia (segunda mitad del 19 y primera del 20), se consideraba que las mujeres sólo servían para copiar, que no tenía genio creativo (por eso podían dibujar pero por eso no pasaban a la historia del arte), pues esta otra parte de su obra la hacía en secreto. Supongo que también influiría que si una mujer no hace o es como se la permite hacer o ser, corre un grave riesgo, de posibilidad de vivir normal siquiera. Quizá por eso las mujeres, por ese terror de siglos al saber eso, han defendido como fieras siempre el patriarcado, un sistema terrorista para este grupo tan numeroso de personas. Y es que siempre se las apañan, esa presión social y ese poder patriarcal, para distorsionarlo todo.
Miedo me da leer la biografía que le han escrito a esta mujer. (También soy crítica con la bio novelada de Circe sobre Camille Claudel por mencionar una bio que sí hemos leído muchas feministas y que yo no considero una bio feminista más que en el sentido de que rescata la existencia de una mujer y de una artista.) Hay que ser algo así como espeleóloga para abordar estas tareas. Y siempre me siento mal porque leo poco, pero es que leer es doloroso cuando tienes inteligencia feminista. No es sólo un ejercicio intelectual.
Y me gustaría mucho poder leer datos estadísticos sobre: número de bios sobre mujeres escritas por varones, y escritas por mujeres; al revés: bios sobre varones escritas por mujeres, y escritas por varones; tesis centrales de las bios: cuál es el peso central de lo que se comunica, y cuál es el enfoque fundamental de la obra. Y ventas o difusión, apoyos a la difusión de tales obras. Porque en el patriarcado hay un interés extremo en ocultarlo todo sobre la realidad humana de las mujeres, y si sale algo, en distorsionarlo. Ni nos damos cuenta cómo ayudamos. Así que lo más sano es sospechar, e intentar quedarse con lo menos dogmático, intentar rescatar ideas, datos para ubicarlos en otro marco de interpretación.
El otro día hablábamos aquí de si Mina Loy era o no futurista, y yo mencionaba que era lógico que renegara del movimiento futurista, por saturación y asco a tanta distorsión y autoritarismo de los patriarcas finalmente, pero eso no quita que ella construyera nociones de futurismo en su obra. Leonora Carrington, Remedios Varo, Frida Kahlo, Maruja Mallo, que tuvieron obra surrealista, aporte al surrealismo, no aparecieron en ninguna historia que pudimos estudiar del surrealismo y cuántas más se quedarían fuera en especial si sus vidas no tuvieran «hombres reseñables». Breton y los surrealistas hasta Dalí pasaron olímpicamente de las artistas surrealistas a pesar de que se nutrieron de su obra, y ellas pasaron de ellos e hicieron lo suyo, que es lo que finalmente tenemos que hacer para no pasarnos la vida «respondiendo a» (esa esclavitud cuya denuncia se la leí por primera vez en mi vida a Virginia Woolf) y poder desarrollarnos. Pero es un crimen contra la humanidad, contra nuestras posibilidades de evolucionar a sociedades que descarten las violencias y opten por el empleo de la inteligencia para aprender a convivir y resolver problemas.
Y luego parece mal el poema que escribí, «De qué me sirve leer a Hemingway», por ejemplo, y disculpitas por soberana arrogancia pues soy de la masa anónima y mi aporte a la cultura es nulo en valor. Que digas lo tuyo pero sin meterte con nuestros Héroes y Contrahéroes, porque para algo son quienes lideran la especie.
Realmente la gente debería tener interés en plantearse qué es violencia y qué no lo es, porque todos esos conceptos están bastante liados, desde la inteligencia feminista o digamos mejor, desde la racionalidad empática humana.
PRINCIPIOS E IDEALES. Los principios asfixian, son inflexibles, y por tanto, irreales y duros. Lo mejor son los ideales. Te dan aire, espacio, también para equivocarte, y mejorar, y te sirven de guía para no perderte.
HÉROES Y NADAS. Cuando un hombre sale al mundo a defender que el resto de las personas tenga derechos, es un héroe. Se le respeta con sólo tener noticia de ello. No hacen falta comprobaciones. Se le venera. Cuando una mujer hace lo mismo, no se la ve, no se la reconoce ningún mérito. Es su obligación: cuidar al resto. Algo biológico, sin mérito, por tanto.
HÉROES Y LOCAS. Cuando un hombre lucha por el resto, es un héroe. No hay duda alguna. Todo es admiración. Muestra nobleza, solidaridad, coraje. Cuando una mujer lucha por el resto, se duda siempre, como cuando denuncias una violación. Ella da miedo. Hay que cuidarse de ella. Y además, en lugar de nobleza, se la ve histerismo, en lugar de solidaridad, exceso, en lugar de coraje, violencia.
Que los hombres no estén en la lucha contra la prostitución (patriarcal) y el porno (patriarcal) y la violación (atrocidades de guerra patriarcal contra las mujeres, y nada de cosa biológica de necesidad) NO NOS HACE PENSAR a las personas feministas que sea porque ES PROBLEMA DE LAS MUJERES, SU LUCHA (y el colmo de la malformación pensante: que hay que respetar a las chicas y que hagan su lucha). La lucha no habría que hacerla sin agentes que operan, con sus «necesidades» o ganas de hacer daño, dominar o humillar. Sin esa OBEDIENCIA CIEGA al sistema.
Y LUCHAR, ES ALGO QUE PUEDE HACER TODO EL MUNDO EN SU DÍA A DÍA. NO HACE FALTA UNIRSE A NINGÚN MOVIMIENTO. SÓLO HACE FALTA TENER CORAJE Y USAR LA INTELIGENCIA.
Si «las mujeres» aprendieran a darse placer independientemente, y «los hombres» aprendieran a erotizarse sin tener que aprender misoginia (cosificar a las mujeres, usarlas y abusarlas), las relaciones sexuales serían mucho mejores, más libres, placenteras. Funcionarían. Y esto tendría una repercusión individual y social probablemente increíble, que al parecer, no se imagina.
Un músculo que yo tengo viene de algo que me dijo Rosa una vez. Me dolía de que la gente no tuviera límite con quienes daban, y le pregunté por qué. «¿Por qué piden y piden a quienes más dan?» Y Rosa respondió: «Porque son las únicas personas que dan».
Dentro de lo malo de saber que la generosidad o la solidaridad no son tan comunes en la especie (al menos en el contexto hostil de culturas de violencia como las patriarcales), esta frase fue un consuelo y una razón motor para seguir defendiendo, nutriendo la generosidad y la solidaridad porque decía, Rosa me dijo, que la gente quizá no sólo respondía así por maldad, o por su sucedáneo, la mezquindad, sino también quizá por una razón comprensible.
Ahora que Rosa no está, quería compartir esto porque la echo de menos y con esto que yo tengo de ella, de alguna manera, podría ella estar aquí un rato.
Nunca he tenido miedo al coco. Soy el tipo de persona que al escuchar, «Mira, ¡el coco!», se acerca a la persona señalada para decir, «Hola, ¿qué tal?». Sí siento algún miedo, no obstante: hacia quien me ha advertido de lo que con toda probabilidad no constituye un peligro.
Y es de temer, el juicio unánime de las personas bien integradas en la sociedad y sus submundos sobre su objetivo. Intuitivamente, escribí el relato «Bella y la bestia» para intentar mostrar algo de esa realidad siempre invisibilizada por ese mecanismo social que activa la violenta convicción, el todos a una, el cerrar filas que es la normalización del terror, en sus dos sentidos, el terror como modo de vida y el terror como norma; esa brutalidad que encarnan las buenas personas en el día a día de sus acciones normalizadas y normalizantes. Espero que la belleza de las escenas sobre las percepciones de la niña no impidan ver el bosque de esa historia. Sospecho que le podría pasar algo parecido al relato «Dinero»: la belleza de la percepción infantil retratada sobre para qué sirve el dinero podría ser usada como venda cegadora para no comprender el mensaje fundamental sobre la relación adulta prevalente con el dinero y su consecuente brutalización de la inteligencia.
Volviendo al coco, el aspecto de terror de las historias contiene un eco que está invevitablemente unido al mencionado proceder de exclusión o linchamiento y que es la ferocidad que representa cómo la Buena Gente necesita educar en que es preciso usar a alguien para que todo el mundo pueda respirar en su atmósfera de terror, para que todo el mundo haga piense y diga exactamente lo mismo al mismo tiempo, voluntariamente.
Con el tiempo, he desvelado el verdadero significado del dicho «Dime con quién andas y te diré quién eres», lo retorcido de la distorsión que encubre la frase. Pero prefiero exponerlo con una transformación, ubicándome en el otro punto de vista, para que así pueda servir al menos como autodefensa a las personas que son usadas por la mayoría como cocos: «Dime de qué me acusas y te diré lo que me estás haciendo».
Aquí El Reincidente, de Rafael Sánchez Ferlosio, una fábula precisa sobre el miedo que dan los cocos al Poder de facto, siempre.
Y «Bella y la bestia» y «Dinero» pueden leerse en ebook o pdf visitando la página del libro de relatos La saltadora. Relatos feministas (1991-2014)
(Del muro de mujerpalabra en Fb) SOBRE NOVIOLENCIA. La población debería pensar más en esto porque se tienen ideas muy raras sobre algo que puede suponer vivir una vida con más calidad en muchos sentidos. Se cree que la gente noviolenta come sólo lechuga, pone la otra mejilla cuando les atacan o agreden, suspenden el uso de la inteligencia crítica, y ceder sumisamente, lo que se dice «ser flexible» que quiere decir «ceder en lo que no se puede ceder», para no disentir jamás con nadie bajo ningún concepto. Y algo importante: que sus principios inviolables les impiden alzar la voz. ¡Y cómo no se ven un montón de violencias que se ejercen a diario! (conceptuales, actitudinales y de palabra, por ejmplo).
Realmente debería sentarme a escribir sobre este tema. Si tuviera tiempooo! Cómo me gustaría escribir sobre violencia y noviolencia desde la inteligencia feminista! Suspiritos!
Martin Luther King decía: «Los que (en masculino, claro, como siempre: el mundo concebido desde el patriarca y dirigido a los patriarcas) aman la paz deben aprender a organizarse con tanta eficacia como los que aman la guerra». Lo sé porque su mente no tenía nada de inteligencia feminista. El día de celebración cuando dio el discurso «I have a dream» Tengo un sueño, no dejó que las mujeres dieran discursos ese día, a pesar de que Rosa Parks, presentada eso sí como ama de casa cansada y no como lo que era además, una activista, ya era «famosa». Les dijo que ya les organizarían un día para ellas. Es decir, Martin Luther King era un patriarca, como Gandhi, y no podían ni concebir que quizá las mujeres activistas que les rodeaban (vistas siempre como eficaces secretarias o ayudantes) pudieran ser pensadoras y pudieran tener buenas ideas sobre cómo proceder para generar procesos noviolentos eficaces para transformar la sociedad. Ahora tenemos el movimiento feminista y la gente sigue sin ver su conexión con la lucha noviolenta más eficaz. ¡A desarrollar inteligencia feminista! ¡que seguimos sin terminar de arrancar! A dejar de tener miedo a las mujeres que piensan, hostias! A dejar de subestimarlas, desvalorizarlas, demonizarlas. Pesadez infinita, estupidez máxima! ¡QUE NO TENEMOS EL CHICHI PARA FAROLILLOS!
Sea por miedo al violento, a quien es capaz de ejercer cualquier tipo de violencia cuando le convenga, a que nos haga daño o nos use para justificar hacer daño a otras personas (sea éste el Hombre o las mujeres patriarcales, cuyo único valor en la cultura no es parir, pues eso es su obligación y algo sin mérito ya que están diseñadas biológicamente para hacerlo, sino defender al Hombre con su vida),
Sea por miedo a la masa (a la mayoría cuyo comportamiento prevalece en una sociedad, sirviendo así de descriptor de dicha cultura), que a través de la tradición y los usos y costumbres protege a sus líderes y perpetúa su sistema de violencia (valores, ideas, actitudes, acciones, palabras), sin cuestionar nada (una violencia fundamental en este sistema) (y aquí recuerdo la idea que Mayo del 68 recogió en “tenemos las sociedades que generamos”),
Sea por el principio económico del mundo animal según el cual hay que evitar el enfrentamiento físico, la violencia física, y sólo ejercerla por supervivencia (comer o que no te maten o desplacen). (Aunque aquí el animal humano, sometido a sistemas de violencia en las sociedades que ha construido desde el neolítico, ha hecho algo excepcionalmente retorcido: transformar un talento en una fuente de violencia, enseñando e imponiendo a través del lenguaje humano, excepcionalmente complejo e infinito en su creatividad y usos, el sistema de violencia.),
el caso es que todos los días reproducimos el sistema de violencia, y no tenemos intención de dejar de hacerlo, como especie. Siempre hemos borrado todo rastro del hecho positivo de la inteligencia humana, borrando a quienes pudieron imaginar y realizar cosas que nos empeñamos en considerar utópicas, ridículos ideales, porque en el sistema de violencia en el que vivimos, todo lo que nos puede hacer animales buenos y bellos está muy claramente excluido del sistema de valores y valoración, y es perseguido si sale aflote por los medios más cobardes y perversos, puestos en práctica no sólo por las malas personas sino también por la mayoría que renuncia a pensar porque confía en que su rumbo, el de siempre, es el que debe de ser. Queremos creer como grupo que la violencia es inevitable, y que mentir, ningunear, engañar, nutrir la ceguera, no querer ver ni escuchar ni saber de las cosas que nos dan posibilidades de civilizarnos realmente, desvalorizar, difamar, manipular, ridiculizar, dominar, explotar, torturar, castigar, aislar, estigmatizar, despreciar, malinterpretar, abusar, ignorar la existencia del resto, así como apreciar, valorar, admirar, amar los hechos violentos del sistema que creemos definen nuestra identidad, son hechos necesarios y convenientes que se pueden aceptar con incluso satisfacción porque hemos consensuado que no los vamos a considerar violencia cuando los ejerzan los líderes violentos o la masa que encarna la tradición. Y algo más:
Además, cotidianamente, hemos decidido que será más violento el razonamiento crítico, es decir, que se “tengan que escuchar” razones sobre por qué algo del sistema es violento o injusto, razones que apuntan no sólo a la necesidad de transformarlo sino que además (¡cuánto más peligrosas!) plantean cómo podríamos hacerlo; consideramos más amenazador el diálogo construido desde la racionalidad empática, el consenso alcanzado tras el análisis de cuántas más variables y enfoques podamos concebir (nunca hay tiempo para justo eso y sí para escuchar horas de palabras huecas o violentas conceptualmente), y que se alce la voz en este sentido (que se hable fuerte es intolerable para la mayoría que defiende el sistema de violencia), que perpetuar el invisibilizado y rotundo sistema de violencia que reproducimos todos los días.
Alzar la voz puede no ser violencia, Callar puede ser violencia
No todas las voces alzadas son violencia, algunas responden justamente a la violencia y en general pierden, porque la violencia siempre se impone, y las voces alzadas que razonan y aspiran a construir mejores relaciones no se imponen nunca, aunque tengan que subir el volumen para que no se las acalle tan definitivamente, y aunque se vea claramente que lo que enfrenta sí es violencia, violencia masiva porque está validada y no permite, digamos, que crezca nada cerca de sí.
De la misma manera, no todos los silencios son noviolentos. No sólo hemos conseguido desarrollar la violencia a través de la palabra; sabemos cómo ejercer la violencia a través del silencio y los ejemplos están ahí todos los días. Si no estuviéramos con la inteligencia tan endurecida por tanto siglo de violencias y pudiéramos mirar el mundo habiéndonos humanizado, limpiado un poco de tanto adoctrinamiento brutal, lo veríamos y nos avergonzaría, y querríamos remediarlo, hacer algo por recuperar la dignidad humana, por rescatar nuestra maravillosa mente humana, tan maleable y llena de potencial para desarrollos asombrosos y buenos.
Aunque esta viñeta (de los años noventa del ¡siglo anterior!) la hice respecto a las guerras en el planeta y la lucha (noviolenta) feminista por ponerles fin, para exponer cómo no se tolera que una mujer alce la voz para exponer razonamientos, argumentos, y se acepta bien que se bombardee a miles de personas y una tierra, me vale para ilustrar este tema más amplio que desarrollo ahora. En vez del brazo de un alto mando militar señalando en un despacho dónde bombardear a la población podríamos tener a una mayoría callada en una reunión dejando que a una persona que razona alzando la voz porque sistemáticamente se ignora su razonamiento y ni se refuta, se la esté diciendo que no son modos y no se tolerará, divirtiéndose la atención del verdadero problema de violencia que se trataba, y encubriéndose por tanto esa otra violencia, la refutada a través del razonamiento de la persona que se veía forzada a alzar la voz, siquiera por desesperación al no ser escuchada, al constatar que no se desea entender lo que dice.
Yo gritoooooooo! li lo líiiiiii, Gritooooo, Gri-i-itooooo! Propongo una acción directa noviolenta: que gritemos cada vez que vemos que alguien use violencia conceptual o verbal en la vida cotidianaaaaaaa! A gritar! MOLESTO? LUEGO EXISTO! YO GRITOOOOOOOOOO, ALZO LA VOZ! Ay, voy a escribir un relato de esto: Alzo la voz! Escribamos relatos: relatemos todas las voces alzadas que nos han traído los derechos, y la gran diferencia de diferentes gritos! Los gritos de quienes se imponen (sobre todo si son varones o «madres» patriarcales) no se ven más que como naturales, legítimos, del orden, los gritos de las mujeres, histeria, sin duda. Pero resulta… resulta que pueden tener otra explicación! O no? Será que sólo somos histéricas excesivas incapaces y que nunca hay motivo de desesperación ni para alzar la voz?
Sobre el problema del egoísmo. El mayor problema no es que queramos cuidar lo nuestro. Eso no es un problema. Es lógico y natural. El problema se da cuando cuidar lo tuyo implica abusar del resto, o sea, violencia hacia el resto. Revisando frases conocidas, El límite de tu egoísmo está en los derechos de todas las personas. Ahí radica la diferencia entre el egoísmo noviolento y el violento o patriarcal, que perpetúa el sistema de violencia desde lo que Hannah Arendt al parecer llamó la vanalidad del mal.
La construcción de géneros patriarcal es un crimen contra la humanidad.
En relación, estoy de las mujeres radical e inconscientemente patriarcales… que no puedo más… De los hombres así, sin duda, pero también de esas mujeres.
No entenderán todas esas personas que la mente humana es maleable y que se puede desarrollar hacia la humanidad, superando el anacronismo de que los genitales determinen un desarrollo determinado según espera todo el mundo… qué hartura que tengo…
Los hombres patriarcales sobreestiman su inteligencia, las mujeres patriarcales la subestiman y matan a quien sea, como esclavas entrenadas, ¡antes de que se dude de «Sus Hombres», los líderes de la especie! Cansino.
Cómo se perpetúa la invisibilización de ciertos tipos de violencia
Monólogos del Patriarca
Es violento que nos grites, una agresión a nosotros y a la comunidad. No hay motivo, nadie ve que haya motivo, no son formas. No, el contenido es irrelevante y tus motivos, porque no hay justificación. Gritas porque eres excesiva e irracional. Eres la única que grita. Nunca antes habíamos tenido problemas así hasta que llegaste tú. Jamás hemos tratado mal a nadie, jamás hemos sido injustos o forzado situaciones, jamás reflejamos nuestros miedos y problemas personales en nuestro trabajo. Cuando tenemos problemas es porque la gente no comprende el peso que llevamos, que el respeto tienen jerarquías, como los derechos: hay gente que debe necesariamente tener más.
Nosotros no generamos problemas. Tú sí generas problemas, protestando sin motivo… Por eso nadie escucha lo que dices. No nos interesa. No nos interesa lo que diga alguien como tú, que grita.
Y tenemos que hacerte daño porque nos obligas, no es por gusto. Nos obligas.
HISTORIAS DE MI MADRE. Bueno, ahora me voy a echar un partida de póker online (con dinero de mentira, eso sí). Me recuerda a mi adolescencia tardía y primera juventud. Mi madre organizaba timbas en casa con mis amigas y amigos o con quien pilláramos. Empezábamos con 5 pesetas, y a veces apostábamos 25 ptas. O sea, jugábamos de dinero, aunque eran cantidades pequeñas. Jugamos también mucho con la gente que trabajaba en el circo, cuando venían a Madrid, el Price. Con buffalo bill y el domador de monos y el de leones, y la troup de acróbatas búlgara. A mí eso me divertía pero me ponía triste el circo y ya sé por qué, claro. Volviendo a mi madre y las timbas de póker, suena fatal pero era lindo e inocente. Me decía siempre, «Si tienes candidatos, tráetelos. Si no saben perder, no te líes con ellos», jajajaja… Mi madre fue adelantada a su época. Me dijo a los 16 lo que necesitaba saber para no quedarme embarazada. Yo entonces tenía como 10 años mentales y me parecía asquerosa la idea de besarse con las babas en la boca con nadie!! También me dijo algo que siempre he creído me salvó de muchas cosas: No tomes drogas con gente que no te quiera de verdad, y si las tomas, sólo pruébalas, no tomes la dosis que tomen quienes te las ofrecen. Cuando lo pienso, me admira. Ella sabía que yo volaría pronto y seguro que aunque temiera mucho que me pasara algo, temería más cortarme las alas. Y pobre! Siempre vivió con el complejo de ser una mala madre, con ese peso insoportable, y teniendo que escuchar a la gente decirla que una madre nunca haría todo aquello que hizo. Cuando me envió a las antípodas porque me preguntó y yo quise, para aprender inglés, la llamaron «mala madre», dijeron que quería «librarse de tener que cuidar a la niña». Qué barbaridad. La violencia patriarcal y sus caminos inexcrutables! Pues voy a echarme un poker! Para despejar la mente antes de irme a descansar. Y un abrazo a la gente que no ve cosas raras en las cosas inocentes y/o sabias.
ODIO A LA EDUACIÓN. Que en España esto es lo que ha habido, hay y posiblemente habrá lo ilustran infinidad de cosas que sabe el profesorado de la pública especialmente bien. Pero el caso del investigador de Podemos es un buen ejemplo. Para mí el caso más grave es que han convertido los instis en cárceles para el profesorado y el alumnado. Sin libertad, la libertad que te permitía decidir antes si faltaba una profe, si quedarte con un grupo en clase (hablando bajito porque si no el bedel de planta te echaba y tenías que ir al patio), si ir a la biblio a ponerte al día al fin, o a la cafetería a aprender a relacionarte, o al patio, a lo mismo, o incluso a jugar a algo físico, todo actividades vinculadas a practicar la comunicación humana y la empatía, eso que nos acompaña tanto y que es de lo poco que nos informa sobre el valor real de las relaciones humanas, con trabajos para padres y madres de todo el día fuera de casa, y sus nefastas decisiones de asegurarse de que sus hijos e hijas jamás tengan un rato libre para aburrirse y quedar con gente sin estrés para estar ahí con la gente, aburriéndose en comandita o no, se ve que una persona adulta no puede educar a una persona menor y van y se lo cuentan al profesorado, culpabilizándolo de la situación en realidad. Y dan ganas de decirles: Pues si dejáis de considerar la educación como una guardería y pedís a los políticos que hagan políticas educativas y no de guardería, porque os siguen la estela, esta estela autoritaria que os traéis, de desprecio histórico y odio a la cultura y la educación, de no entender lo que es la cultura y la educación y la investigación y no querer escuchar ni entender, aprenderlo, y nos dejáis hacer nuestro trabajo, quizá os llevéis una sorpresa, porque el hecho es que en este país en la pública hay muchas personas que sí saben educar. Pero no: visitad el blog de profes que se atreven a analizar la realidad. Sus posts estarán llenos de insultos y distorsiones demenciales, las clásicas: que se quejan mucho y cobran muy bien y encima tienen muchas vacaciones. Es una IGNORANCIA salvaje y esclavista, de no querer pensar, ni razonar, de no ver que si la educación primaria y secundaria de un país estrangula al profesorado, la sociedad se vuelve más violenta y más incapaz de razonar y negociar y convivir. Y sólo aprende lo que se la enseña: la imposición. Y no se aprende lo único que nos salva de la violencia total: la comunicación, la compañía.
Violar, aterrorizar y matar el Hombre a las mujeres.
Patriarcado, torturador asesino, padre de todos los sistemas de violencia que conocemos. Basta!
25 nov 2014
Expresarle a las personas el valor que les damos, lo que las apreciamos podrá hacer que se sientan halagadas, aunque lo normal es que haga que se sientan queridas y apreciadas, que no es lo mismo, pero sin duda alguna no es lo mismo que halagar, es algo mucho más hondo, empático, de relación humana, y no algo tan trivial y dañino como el halago que se le enseña al Hombre a hacer en el patriarcado.
En el patriarcado se le dice al Hombre que debe halagarlas con regalos y palabras. ¿Para qué? Aquí aparece otro de los elementos distorsionantes y desagradables del «halago» (a parte de que está claro que es unidireccional: del Hombre a las mujeres): para que les den placer sexual o en el más permanente de los casos ¿amor? (el unidireccionalismo se ve en que si le damos la vuelta, no es lo mismo. Las mujeres deben respetar al Hombre, admirarse de sus méritos reales, y ahí está el sistema de héroes y tal, no hace ninguna falta que se le digan tonterías huecas; también porque Él manda en realidad respecto al sexo, por eso durante siglos si ellas no querían sencillamente las violaba y eso se consideraba «seducir», no tortura). Halagar a alguien no es valorar y apreciar a alguien y hacérselo saber, al menos no en el patriarcado: a las mujeres hay que halagarlas para «llevárselas al huerto», «tener la llave a su corazón», como dicen metafóricamente (porque si fuera eso la llave a que te quieran, qué cosa tan insignificante serían las mujeres!, como lo que nos han dicho durante siglos contra toda evidencia!; y si es metáfora de su vagina, ya sabemos, es siempre lo mismo, y encima consideran de mal gusto que lo denunciemos).
Toda esta ideología es machista y misógina. Las mujeres son personas con mentes humanas, no niñas caprichosas a las que hay que engatusar para que te obedezcan o hagan lo que quieres.
Si el Hombre quiere «comprender a las mujeres» bastaría con que empezara a desarrollar inteligencia feminista para limpiar su mente del dogmatismo patriarcal, y así vería que la mente humana es impresionante y compleja y que los genitales no determinan su desarrollo. Con cada «no comprender» suyo se nos está diciendo: «sois caprichosas, hay que manipularos para sacar algo bueno de vosotras». Como a «los indios» con las cuentas y los cristalinos. Cruel la ideología patriarcal, violenta en extremo.
Valorar a las personas es algo que necesita cualquier persona, hacerlo y recibirlo. Engañar, engatusar, manipular, cosificar, usar estrategias es algo que necesitan hacer quienes no pueden sentir empatía hacia quienes tienen delante, esa inteligencia.
Si quieres que te quieran, aprende a querer, a valorar a las personas, y no a tratarlas como si no fueran personas (como si fueran muñecas). (Hay que ver qué afición tiene el hombre patriarcal a jugar con muñecas, qué obsesión con forzar a otras personas a ser sus muñecas!) La igualdad va de mirarse las personas a los ojos y hablarse como personas, no de juegos de poder.
No. Lo que quieren es que no puedan ser amables sólo los hombres y hacia sólo las mujeres. Quieren que todo el mundo, que cualquiera pueda ser amable. Que un hombre pueda abrirle una puerta a otra persona, sin importar sus genitales ni las posibilidades de acostarse con ella. Que una mujer pueda cederle el asiento a otra persona si quiere.
Las feministas hacen por tanto una crítica racional empática al tema de la galantería, que combaten por su machismo y misoginia, pues se cosifica a la mujer en cómo se la concibe y en cómo se la trata y por tanto se degrada o caricaturiza la relación.
Desde la inteligencia feminista, luchamos por ser amables como gesto de cuidarnos y mimarnos las personas, y no como mecanismo para codificar a la gente y conseguir cosas de ella. La amabilidad es un rasgo humano no del Hombre.
BELLEZA Y TRANSFORMACIÓN SOCIAL. En el arte que hemos hecho al margen del Sistema se nota: que la belleza es algo que nada tiene que ver con lo que el Sistema vende como belleza y que su poder de conmover, llamémoslo «belleza», tiene un poder inmenso para la transformación. Lo mismo pasa con las ideas, pero como se expresan en palabras, el tema de la interpretación juega en contra.
No han echado de menos a las mujeres. Siglos de historia de la humanidad, y no las han echado de menos. Incluso piensan, cuando se lo plantean, que se debe a que no hicieron nada reseñable, media especie falta de talentos. Y se atreven a decir que hablar de derechos humanos de las mujeres y visibilizar su existencia es inadecuado, excesivo, repetitivo, que está ya superado. ¡Claro que es inadecuado! Nunca se ha hecho, ¡las mujeres pudiendo libremente vivir y pensar y ser! Nuestra atención para el Hombre, que merece.
Pero la realidad es otra: es justo y además, lo necesitamos: hemos prescindido de millones de personas inteligentes, y además tendentes al uso de la racionalidad empática y al rechazo de la guerra y las otras violencias, y la mayoría eran mujeres.
Sólo una especie arrogante e ignorante seguiría insistiendo en tamaño crimen.
Tenemos las sociedades que generamos. Una gran idea ignorada. La violencia abyecta de quien impone el hambre, la dependencia y la guerra se refuerza y nutre de la mezquindad de las personas que no piensan, ejercida como un destino implacable, un hecho inevitable, justificada así, todos los días de su vida; esa insistencia en perpetuar las relaciones de violencia, hablar el lenguaje maniqueísta de la guerra, despreciar la colaboración, la empatía, la convivencia, subestimar la importancia de la libertad, las formas del amor y la justicia. Despreciar el generar cosas con valor para reforzar la expresión de lo que hace daño, destruye, socava mientras se dicen que deben hacerlo, que sus víctimas u objetivos les obligan a hacerlo.
Ahora entiendo por qué de joven soñé que volaba de pie, a ras del suelo.
Y me asombra haber encontrado un amor que sobrevuela de puntillas el mundo.
La soledad es un lugar bellísimo.
RAE INCAPAZ. Cuando la Real Academia de la Palabra Muerta intenta pretender superioridad intelectual y de conocimientos al descartar socarronamente la crítica a sus sesgos clasistas, machistas, misóginos, homofóbicos, transfóbicos, racistas, gitanofóbicos, especistas (llamémoslos “ningunistas” cuando la violencia se ejerce por omisión; esa omisión que a tantos grupos humanos les ha costado no aparecer en ningún lugar de valor de la Obra Humana), con un triste “Nosotros sólo recogemos las palabras que usan las personas, no determinamos las definiciones” queda expuesto su profundo lío mental y su afán de distorsionar y manipular.
Hay mucho que decir a este respecto. Anotaré brevemente: 1. en la selección de los términos que la RAE hace hay condicionamiento ideológico del tipo en que no se ha asimilado la noción de derechos humanos; 2. en las definiciones hay ese mismo condicionamiento ideológico, al que se suma una ideología política tradicionalista, es decir, patriarcal violenta, el mundo visto desde ahí; 3. ilustración con ejemplos.
Podemos alarmarnos por mis palabras y no prestar atención, pero lo cierto es que basta con hacer estudios de casos: por ejemplo, ¿Qué términos han decidido incorporar de los españoles hablados en América? (esos que tradicionalmente ha despreciado y considera deben someterse a sus opiniones sobre cómo se debe hablar y escribir). Aquí hay uno (descatalogado), “De mujeres y diccionarios” (descargable): http://www.mujerpalabra.net/pensamiento/lenguaje/eulalialledocunill/sobrediccionarios.htm. Si se atiende, se verá la aplicación del método científico al estudio de un DRAE donde se empezaba a querer “incluir” los españoles americanos (quizá por la pérdida de credibilidad de la institución en España) y cómo el DRAE incorpora maneras de evaluar físicamente a las mujeres en América, y no incorpora ¿qué? ¿Es tan importante no incluir palabras que tienen un uso mayor y más importante para la cultura en cuestión que cómo evaluar físicamente a las mujeres? Para una ideología tradicional, validar el orden patriarcal que establece que las mujeres vienen de una costilla de Adán, es decir, están en débito con el Hombre y deben desarrollar sus vidas sirviéndole, es una cuestión vital. Hay que “ponerlas en su sitio” continuamente (nótese la incapacidad de la RAE para comprender que dentro del feminismo hay lingüistas ofreciendo conocimiento y método). Pero no para personas realizando un estudio científico del lenguaje y recogiendo las palabras que se emplean y cómo se emplean (aquí los llaman Diccionarios del Uso del Español; son los descriptivistas, los hijos de la lingüística moderna, muy superiores al diccionario de la RAE respecto al conocimiento de la lengua). ¿Por qué la RAE no presta atención a lo que la mayor libertad del momento histórico humano, desde el siglo 20 y en algunos lugares, de maneras y en grados diferentes, está generando: que resulta que los genitales no condicionan necesariamente una identidad, porque el cerebro y la mente humana es increíblemente maleable e igual que puede aprender a ser Hombre o mujeres puede aprender a ser Persona? ¿Todo lo positivo y cuestionador del orden patriarcal que ha generado el pensamiento/las relaciones/el lenguaje en el último siglo?
No hay ninguna inocencia y desde luego ninguna ciencia (su aplicación del método científico de estudio de la lengua está minada justamente de eso, de ideología, por su creencia religiosa en el prescriptivismo, ya tarada de raíz; y más tarado es que dada la evolución del conocimiento sigan insistiendo en que deben ocupar un papel estrella en cuestiones de estudio de la lengua!) en los criterios de selección de las palabras que llevan a cabo, ni en las definiciones que realizan. Incluso si añadimos cómo las personas usan las palabras para ejercer violencia se puede presentar la definición así, describiendo el uso; pero el diccionario de la RAE no pretende eso, sino prescribir, y de ahí que tengamos que perder tiempo denunciando sus imposiciones ideológicas a través de sus aspiraciones con el lenguaje.
La RAE debe bajarse de su pedestal y especializarse en estudios y diccionarios etimológicos, por ejemplo, para dejar en paz de una vez el avance del estudio científico de la lengua y que proliferen buenos diccionarios, diccionarios que nos sirvan para buscar palabras, saber cómo se escriben y cómo se usan, pues el uso, esa especie de Frankenstein ahora que se ven forzados a disimular, no nos sirve para eso.
Finalmente, anotar también algo sobre la cobardía o la falta de honestidad intelectual de las personas del mundo de la cultura, incapaces de renunciar a participar en la farsa que es la RAE y su diccionario. ¿Por qué razón darles bola? Sólo son razones negativas para el conocimiento. Se comprende de las personas con ambición de promocionar su estatus para ganar fama y dinero, pero no de las personas que en principio aman la lengua, y su estudio y conocimiento.
Acabo de ver «No me llames fotógrafo de guerra» (2014), un documental que recomiendaría ver con la mente-corazón. Y lo recomendaría a pesar de que la existencia de las mujeres en el mundo de la lucha y el valor, no están bien reflejados, si quiera porque es masiva la representación de hombres.
Con todo, hay cosas importantes que trascienden el condicimiento cultural de ver el mundo del Hombre sólo, reconocer el valor en ese mundo sólo. Cosas compartidas y comunes porque son humanas, a pesar de la distorsión de la concepción patriarcal de todo. Entre otras cosas, porque al menos parte de cada fotoperiodista que aparece ha alcanzado a ver más allá del impulso inicial, debido a la terrible experiencia de la guerra y al conflicto que genera ganarse la vida, ganar una estima retratando el sufrimiento ajeno, como explican.
Afortunadamente, aparece alguna mujer fotoperiodista haciendo su análisis, y aparece alguna mujer en alguna foto, no como víctima y cuidadora «natural» sino como persona.
Del valor, que es algo que se representa continuamente asociado a lo masculino patriarcal (siempre asociado a la acción violenta. Y cómo me dolía el otro día cuando viendo un trozo de una peli de gánsters, el chófer de un gángster da por culo a una chica rusa metida en prostitución forzada ante el psicópata que se lo pide y luego queda como un buen tipo porque le da dinero a la chica, después de la palmadita en el lomo por ser una buena hembra, y le dice: «Sigue viva». Me cansa lo indecible el bombardeo de imágenes/mensajes de hombres violentos que resulta que son buenos en el fondo. Y cómo el cine estadounidense insiste siempre en esto, en lo necesaria que es la violencia para todo y en cómo dependemos de esos Héroes de la violencia), cualquier persona que se haya visto obligada por la violencia a controlar su miedo, sabe bien lo que es, eso: controlar el miedo, conseguir estar, olvidando el terror, el miedo, sobreponerse a esto. Y esto lo pueden hacer las personas, no el Hombre sólo. Y en esto las mujeres no están representadas culturalmente, y cuando lo están, no se las identifica como valientes, como realizando un acto que requiere valor, controlar el miedo. Porque temáticamente en el patriarcado el valor se da en el campo de la violencia, sólo. Sin embargo, el miedo se controla desde lugares distintos, y uno de éstos es la empatía, la solidaridad, el amor, emociones-ideas que podría sentir y siente cualquier persona, no «las mujeres», sólo. Y para que el Hombre no se reduzca a ser «mujer», para asegurarnos de que su valor siempre estará asociado a la violencia, siempre necesaria, el gran dogma: las mujeres cuando hacen algo de valor para la especie, como es «natural», «biológico», no tiene mérito. Cualquier acto de valentía, por ejemplo, en una mujer, que nazca de la empatía, la solidaridad, el amor, el afán de justicia, de cese del sufrimiento, no será visto, no existirá, no será nombrado ni representado.
El valor desde la capacidad de machacar, prevalecer, ejercer violencia no es valor, es guerra. El valor es algo valioso que ejercemos cotidianamente para justamente combatir con pura vida inteligente y solidaria un mundo de violencia e injusticia, y lo vemos a diario en todo tipo de actos incluidos los verbales.
FALTA DE INOCENCIA EN LA CULTURA PATRIARCAL. Leo en el libro de Deborah Cameron sobre feminismo y lingüística que Virginia Woolf y luego Simone de Beauvoir se asombraron sobre la cantidad ingente de estudios que encontraron (de los patriarcas de la cultura, supongo, porque sólo nos ha llegado lo que ellos hicieron, además de que se lo pusieron muy difícil a otras personas) abordando la cuestión de las diferencias de uso de la lengua entre mujeres y hombres. ¿Por qué tanto interés? Para, lo nombraran o no, demostrar en última instancia que la inteligencia de las mujeres era inferior, como se ha venido haciendo hasta el siglo 20 tan exclusivamente. Es asombroso el control que ejerce la sociedad y sus patriarcas sobre qué se difunde y qué no para que el Orden patriarcal se perpetúe. No hace falta siquiera tener la intención de hacerlo, aunque sí hace falta ser capaz de no ver, y de no sentir empatía hacia el resto de realidades.
Así, pongamos, lo que sabe “la gente” así como el mundo de la Cultura Establecida es que cuando los filósofos e historiadores hablaban del Hombre eso nos vale a todas las personas (pues como dice la religión patriarcal, es él quien está hecho a imagen y semejanza de Él, dios, y con eso basta: nos representa también a los seres inferiores de la misma especie y esto es un honor, así que chitón). Y lo que no llega nunca a nuestras consciencias o conocimiento es lo que explican esos mismos filósofos e historiadores sobre las mujeres, a pesar del volumen de textos; y tampoco cuánto trabajo han desplegado para demostrar siempre la inferioridad intelectual de las mujeres (y, al fin añadimos, de toda persona que no se conforme a los dos únicos tipos humanos concebibles en la cultura patriarcal, definidos hasta la náusea).
Cuánta violencia puede ejercerse con la omisión y la ocultación es algo que no todo el mundo comprende. Y sí tendemos a al menos sospechar, quienes que vamos desarrollando inteligencia feminista. A pesar de ello, a menudo seguimos sin poder nombrar con claridad las violencias recibidas. ¿Por qué molestarse en la ocultación y la omisión si se tiene todo el poder?
Si hoy en día sacáramos a la luz todo lo que han dicho sobre la capacidad intelectual de las mujeres, esos Hombres de la cultura, de la política, de la religión, sencillamente avanzaríamos más hacia la comprensión de realidades, lo que nos ayudaría a evolucionar en sentidos más transformadores de raíz. Pero no interesa. Porque cuestiona nuestra identidad, la que cree conocer la mayoría sobre sí y sobre todo sobre el resto de las personas. Va a resultar que nuestro primitivismo violento como especie gira en torno a querer que todo sea simple por pánico a la complejidad de la vida y sus relaciones…
Otra idea útil, pienso, es que cuando hablamos, necesariamente lo hacemos desde niveles y enfoques distintos según contexto. Así, por ejemplo, cuando desde la inteligencia feminista se hace una crítica al Sistema, se maneja el par del sistema sexo-género patriarcal “hombre-mujer” (que no es persona con pene y persona con vagina sino “El Hombre” y “las mujeres” patriarcales, por cierto), pero eso no quiere decir que sólo se conciba ese mundo. Pudiera ser que sí, como quienes identifican que el problema es que se ha omitido y combatido una cultura de mujeres, de personas mujeres que no serían como el “mujer” que define el patriarcado. Pero pudiera ser también que sí se esté concibiendo un mundo de personas, donde los genitales no determinarían nada respecto a inteligencia-sensibilidad por sí mismos. Y no es lo mismo manejar el par de conceptos criticados a manejarlo para explicar el mundo. No todo lo mismo es lo mismo. A mí me sigue asombrando como la gente insiste todos los días a todas horas en la idea de que tener pene o vagina determina cómo desarrollamos nuestra mente-corazón, y me asombra porque no hago más que ver ejemplos que como poco cuestionan esa idea.
¿Por qué no recoger también información sobre lo que las personas comparten? Porque yo he conocido a hombres sin mucha inteligencia abstracta o matemática y a mujeres con mucha inteligencia abstracta o matemática, a mujeres que conducen increíble y a hombres que conducen fatal (de hecho las aseguradoras en algunos lugares, por los datos que arrojan las cifras, le ofrecen seguros más baratos a las mujeres), a mujeres incapaces de introspección o de expresar con palabras sus sentimientos y a hombres que se les da muy bien (de hecho, nos han llegado sus obras de literatura, por ejemplo), a mujeres fortísimas físicamente, no sólo por poder parir y echarse al camino para traer agua o labrar la tierra o por poder soportar una violación múltiple y levantarse y cargarse con las personas vulnerables a su alrededor para trasladarse de zona, fortísimas también a la hora de mover peso, y a hombres que no tienen nada de fuerza física, ni de la de sostener su cuerpo, ni de la de empujar y levantar; o a hombres sin mucho interés en la vida de los orgasmos o del placer físico y a mujeres que lo disfrutan y necesitan cotidianamente porque si no no pueden dormir o bien porque si no viven mal, es decir, sufren.
Lo evidente, si miras, sencillamente, es que no es el tener determinado genital lo que determina lo que una persona puede llegar a ser o es. La práctica, sin duda, marca, así como lo que se espera de ti. Pero si la mente humana tiene un rasgo es la maleabilidad, su capacidad para adaptarse, evolucionar, aprender (y si ahora lo presenta empíricamente al fin la ciencia, siempre lo hemos sabido si no nos tenían el cerebro lavado con dogmas). Allí donde hay más libertad para construir la identidad, enseguida surgen ejemplos que desmienten el Orden Tradicional que han impuesto las sociedad patriarcales y sus ideólogos. Basta mirarte al espejo. E incluso a pesar del Orden Patriarcal, siempre ha habido personas cuya identidad no podía explicarse, reducirse a lo que se suponía que eran. Todos los días veo lo que tengo de mujer por mi cultura, lo que habiéndolo tenido, a fuerza de consciencia y trabajo, he conseguido superar, lo que dejo estar o bien porque no me molesta o bien porque no es prioritario, lo que soy gracias a que me he cuestionado y he cuestionado el orden del sexo-género…
Las simplificaciones del Poder siempre me han parecido sospechosas, en el sentido de que en realidad les falta inocencia, ya que tienen intención, y muy mala, pienso. La diversidad de la vida sólo es desbordante para quien la quiere dominar. Para quien no, es una fuente de asombro y alegría, ya que todx ser vivx tiene su lugar.
A mí me parece que lo mínimo que puede hacer una persona con su inteligencia es desarrollarla. No me refiero a la ese desarrollo habitual, en el marco de la ideología patriarcal, sino a un desarrollo que parte de controlar el miedo y ejercer la solidaridad y sororidad, es decir, el amor (esa palabra tan ridícula en el patriarcado), desarrollo que dándose en ese marco inevitable del Sistema, es capaz de imaginación, pensamiento crítico, racionalidad empática; hace crecer la capacidad de compensar todas las brutalidades que somos capaces de pensar y todas las cosas buenas que somos capaces de no llegar a pensar, sin siquiera ver o saber que las pensamos y no pensamos, todo a causa de la educación patriarcal que conforma (aun hoy, cuando más personas parecen querer generar un cambio a sociedades menos violentas e injustas) nuestras culturas patriarcales brutales. La misoginia y el machismo inconsciente son profundos, y la incomprensión al tema del derecho humano de las mujeres a decidir si desean gestar, parir y ser madres, ilustrativa. Quien debe respetar es quien le pide respeto a sus víctimas u objetivos.
—
De un comentario anterior por un «debate» de esos que inician los y las misóginos inconscientes con la estrella del «respeto».
«¡¿QUE RESPETE?! Que digan que decirle a alguien que le impone la gestación, parto y maternidad a las mujeres que es asesino y torturador es No Respetar es VOMITIVO, por radicalmente y demencialmente INJUSTO. Es literal porque así ocurre: mueren mujeres todos los días por esta imposición, y no morirían si fuera legal o si el aborto fuera libre, y además, se fuerza a la gestación y todo lo que conlleva a mujeres, todos los días, y eso es TORTURA. Da asco moral que te digan que Respetes, que es un tema personal. TAN PERSONAL COMO QUE LO CONVIERTEN EN UN CRIMEN Y EN UNA TORTURA PORQUE NO PERMITEN QUE SEA UNA DECISIÓN PERSONAL?!
Qué injusta y violenta es la IGNORANCIA. LA FALTA DE EMPATÍA DE LA IDEOLOGÍA PATRIARCAL CON LAS MUJERES»
Hoy me han dicho algo muy bonito. Una compañera me ha dicho que quería agradecerme que fuera tan valiente. Yo, sorprendida, la pregunté por qué, y después de escucharla y hablarlo era, en resumen, porque como nueva no asumí ningún orden de las cosas que hubiera o pudiera haber, y partí de mi criterio, de que en principio ciertamente yo creo que la gente tiene buenas intenciones y es capaz, hasta que se vea lo contrario, si se da el caso.
Estoy emocionada porque es cierto, ¡es cierto! (aunque a mí no me lo parezca, porque me parece como «lo que hay que hacer», y esto se ve ridículo, genera comentarios sarcásticos, «bromas» en general; hablo de una vida de 50 años), requiere valentía asumir la soledad en el mundo. Porque (pienso yo) es un tema de asumir tu soledad, y tu libertad para el lujo de verte acompañada por otras personas en la vida. La lucha por partir de Sin Juzgar, Sin Agrupamientos de Identidad, o de positivo, o de No negativo u Hostil o Bélico, la Insumisión a la Guerra, digamos, es una lucha invisible casi siempre.
Como si no pudiéramos imaginar nada bueno.
Nos empeñamos como especie adoctrinada en patriarcado en los bandos que se tienen que destruir o despreciar o…, en los grupos de identidad que se oponen a otros, y nos empañamos en saberlo todo de las intenciones y capacidades de todo el mundo. Y lo cierto es que sabemos muy poco de nuestro potencial y mucho de cómo cortarnos las alas. A pesar de saber que ocurren cosas increíbles todos los días en algún lugar.
Lo hacemos aunque seamos adorables. También decir, no lo hacemos tanto si sufrimos de inadaptación social, que, mira, tiene su lado bueno.
y las personas adecuadas…
Con un poco de suerte
y las personas adecuadas…
Con un poco de suerte y las personas adecuadas…
Con un poco de suerte y ¡las personas adecuadas!
—
(Y bueno, claro, la búsqueda de lo que se imagina, esa imaginación asombrosa.)
—
(una frase de una peli, La pesca del salmón en Yemen)
REFLEXIÓN SOBRE MI PERSONA EN LO TOCANTE A PERSONALIDAD (?)
La invisibilidad, el no importar o el no reconocimiento, tiene su lado bueno, la libertad del anonimato, pero también su lado malo, la autodestrucción, la duda, la inseguridad continua, continuo cuestionamiento y empezar. Si hubiera sido chico, habría podido ser invisible cuando importa, por ejemplo, al entrar en un bar, al viajar por los caminos, y contar cuando importa, por ejemplo, cuando analizas algo, porque indudablemente, aunque el pensamiento crítico es rechazado en los hombres a favor de la cruel tradición, eso en una mujer es sencillamente peligroso, excesivo, negativo y si llegas a pensadora crítica es más tarde, porque todo está diseñado para decirte que tu inteligencia no vale, no es bastante, no tiene nada que aportar (como no sea en las tareas encomendadas como cuerpo femenino que sirve). El lado malo para mí habría sido la responsabilidad pública (oficial), el tener siempre que cumplir (como las mujeres, que tienen esa obligación también, pero ellas sin reconocimiento; y aquí jugaría un papel negativo el reconocimiento para mí si hubiera sido hombre). Como hombre o como mujer, habría sido muy responsable, igualmente, pienso, por eso la parte del reconocimiento en este caso, me habría agobiado. Lo digo porque sé que siendo hombre puedes también evadirte de toda responsabilidad; es otro de los modelos que hay. Las mujeres lo tienen mucho más difícil. Por otro lado, creo que si hubiera sido hombre hubiera sido peor persona, porque tengo un lado violento que siendo mujer he tenido que reprimir, y por tanto aprender a solucionar las cuestiones por otras vías (aquí el filón de conocimiento de las mujeres, para aportar a la política, no de todas, que otras se han especializado en la violencia verbal y psicológica, pero sí de las más críticas con la violencia y autocríticas consigo mismas), y siendo hombre me lo habrían aplaudido, alentado, me habrían dicho que era sexy, todas esas barbaridades demenciales. Pero siendo mujer me odio por odiarme. Creo que a eso la mujer patriarcal está programada. Y si no es odiarse, es maltratarse, ningunearse, reflejar lo que recibe como persona, pues sólo puede ser un cuerpo que trabaja y es usado.
Si hubieras sido el otro género que concibe el patriarcado, ¿habrías sido la misma persona?
Aunque hoy el día empezó con alguna dificultad leve pero de tensión (conducir dormida -primera vez-, conducir a través de un incendio, aparcar metiéndome en la trampa de ir a rayar el coche de al lado y conseguir salir después de 30 minutos de milimétricos movimientos, que no sabía cuáles hacer!), y arrastraba algunos disgustos y pesadillas, ha sido un día en que me siento FELIZ en compañía de la gente que veo (qué pleno ha sido, tanta alegría y tranquilidad, a pesar del cansancio!) y de mis cíberamistades y compañías, que acompañan y apoyan tanto en la lucha por sobrevivir como personas pensantes, constructoras de mundos. Feliz incluso conmigo misma, con cómo voy afinando en la lucha y poniéndolo más difícil cuando hay suerte (para las cosas malas). <3
Lo anoto porque aunque yo tiendo a sacarle la alegría a un polvorón en el desierto, y aunque al fin he encontrado mi Utopía, la vida no es fácil y muchas veces te duele y hace dudar y desalienta. Así que he subido esto Fb:
A los 9 o 10, tirada en la playa leyendo tebeos. Mi madre, al sacarme la foto dijo: «Mira que eres femenina» y lo que le respondí fue «¿Por qué (dices eso)?» Resultó que el sufijo era «-ista», feminista, como ella, aunque ella no lo llegó a saber, claro, porque murió en 1990 (o quizá decir murió 7 años antes). Así de «reciente» en unos sentidos sociales de progreso de aceptación del término, de la idea, a nivel más de sociedad, como sociedad. Mi madre sabía que era una revolucionaria, una transformadora de la materia, de las posibilidades imaginadas, pero no llegó aún a la consciencia de que por ser mujer, ser todo eso siendo mujer, eso la hacía feminista, es decir, una rebelde antisistema de violencias!
LEER. La verdad es que yo no he leído mucho, por un problema mental, que si me gusta lo que leo, me genera cosas y tengo que ponerme a hacerlas (escribir, pintar, comunicarlo/conversar, algo). No es sorprendente que sea activista. Claro que me gustaría poder contemplar más rato seguido, sin producir, pero me cuesta. El caso, no he leído mucho, pero cuando leo, veo cuánta coincidencia. Me asombra. Cuando me enfrenté a Oposiciones, para ser profe de la pública, bueno, llevaba décadas ganándome la vida con el inglés, y había desarrollado mi método lolailo y contrario a lo que se hacía, y bueno, tuve la oportunidad de hacer por la uni a distancia un curso de Doctorado que presentaba la Lingüística Aplicada en general, como una visión general, un mapa, que te permitía luego visitar países concretos. El caso, según leía cosas de psicolingüística, sociolingüística, lingüística veía que decían cosas a las que yo había llegado por el proceso de enseñar-aprender. Es decir, habíamos llegado a lo mismo por caminos aparentemente distintos. Me dio mucho ánimo descubrirlo, y seguridad. Y me facilitó comprender marcos, cosas que sabía pero que no tenía del todo ubicadas. Ahora empiezo a leer más análisis feministas y me está pasando lo mismo. Claro no con todo, pero bueno, yo soy como una cucaracha, casi que me vale todo para algo, aunque no sepa exactamente para qué! 🙂
LEER 2. LIBROS. Pero tengo muchos libros! Y mi idea es leérmelos todos cuando me jubile! Ya he empezado, noPstante, porque estoy en mi segunda mita de siglo y quería cambiar eso, lo de leer poco. Pero tb digo que no hubiera hecho al revés: leer y luego hacer lo que me tuvo tan ocupada. Prefiero mi orden. Parece desordenado, pero aprendo mejor ahora de los libros que de joven. Tengo más criterio y más capacidad para aprender!
ALEGRÍA Y CREATIVIDAD. Escuchando a Peret (un artista gitano, cantante) me han encantado dos cosas. Una es la escena que cuenta sobre lo que recuerda de haber empezado a bailar. Fue de alegría, cuando su padre le traía un trozo de pan blanco, que no comían a menudo.
Es lo más emocionante de la actividad creadora: cuando nace de la emoción de la vida cotidiana, intensa, de alegría. Pienso en cómo ha sido que en las sociedades patriarcales, el mundo de la creación se haya desarrollado tanto por la expresión del sufrimiento, y tan poco por la expresión de la alegría. Me pregunto si hubiéramos vivido en sociedades menos violentas, si habríamos desarrollado el mundo de la alegría mejor, plasmándolo en el arte, lo habríamos plasmado en el lenguaje y en el arte, seguro! Cuando era más joven, para explicarme por qué escribía siempre cosas de estar mal, de sufrimiento, me decía: “Es porque la alegría se comparte, se vive compartiéndola, pero con el sufrimiento no puedes estar dándole la lata a la gente que te quiere todo el rato.” Luego también pensé que crear con Materia Sufrimiento era para vomitar tu mierda, transformarla en algo menos feo y poder así contemplarla para solucionar el problema. Porque siempre he creído que muchos sufrimientos se podrían solucionar pensando un poco, de una manera diferente. No todos, la muerte es bastante rotunda, que te torturen –mientras dure- o asesinen es rotundo también. El hambre se soluciona comiendo. El frío, no pasándolo. Pero que no te quieran y aprecien, eso que nos importa tanto, tiene diferentes grados y tipos de soluciones. La confusión y estar perdida también. El miedo. Hay muchas cosas que pensando, de alguna manera, comprendiendo, de alguna manera, incluso comunicando(se) pueden llevarse mejor. Con todo, siempre eché de menos no escribir más desde la alegría. De mayor, pensé además que, dado el mundo, no puedes hablar desde la alegría, que sería casi una bofetada. Y sin embargo, también he visto que es la alegría lo que más agradece la gente, que les alegres, que se puedan sentir con ánimo y energía para vivir.
Pero sobre todo, vivir en un tipo de sociedad que se basa en la violencia como medio para todo, ahí, la alegría es una gran amenaza porque no sostiene las violencias.
La otra cosa que me ha gustado mucho escuchar de Peret es cómo describe el proceso de creación de la rumba catalana, pues le llaman el Creador de la Rumba catalana. Lo hace de una manera tan reconocible para quienes realicen procesos creadores, que casi huele a tierra negra humedecida en una noche de verano.