En apoyo a Coeducación para personas adultas en la pública de idiomas (Escuelas Oficiales de Idiomas)
Category: Intro al Feminismo
IGUALDAD. Cuando se habla de igualdad, a menudo se distorsiona lo que se quiere decir, lo que yo al menos entiendo: No es igualar lo que pueden hacer los hombres, no es siquiera (que esto es imperativo pero a menudo un arreglo de transición a sociedades noviolentas) pedir igualdad de derechos. Es tener la misma LIBERTAD para desarrollar el potencial humano que media humanidad, las «mujeres» según la ideología patriarcal, lleva siglos teniendo prohibido hacer en las sociedades patriarcales.
SOBRE LA GUERRA. Es curioso lo muy eficaz y complejo de la evolución del concepto guerra entre los señores de la guerra, y lo primitiva que sigue siendo la idea de guerra entre la mayor parte de la población, que sigue pensando en campos de batalla SÓLO, cuando hay un montón de guerra en «luchas violentas» encubiertas bajo términos como «información», «ley y orden» o «lucha contra las drogas», o las políticas de dependencia alimentaria, o financiación de grupos que mantengan la falta de construcción de sociedad para perpetuar el saqueo y la esclavitud. La ideología patriarcal sólo se basa en violencias ad nauseam. Qué triste y enfurecedor y bobo es que se siga sin escuchar a las personas y grupos (aún minoritarios en cifras totales pero cada vez más) que usan la información, la buscan, eso sí, para conocer la REALIDAD y buscar soluciones noviolentas a los problemas, como las gentes de los grupos de derechos humanos, feministas, pacifistas, antiglobalización, ecologistas, etc. No que allí toda la gente esté libre de ideología patriarcal, pero están en la lucha por conocer mejor y actuar mejor.
Así funciona la ideología patriarcal:
El maltratador es una víctima de la persona a la que maltrata, y la comunidad arropará al maltratador con su silencio cómplice, disimulando, permitiéndole, quiero decir, su abuso. Miente y manipula y no tiene ningún grado de inteligencia-sentimiento de responsabilidad individual y social y sin embargo, cuando su víctima responde a la violencia sufrida, las más de las veces sin reproducir la violencia, es él quien da pena a todo el mundo, lo que es decir que entre todos y todas intentarán ser presión efectiva para que quien se ha atrevido a cuestionar la realidad de abuso vuelva a su lugar.
Un abuso del maltratador jamás será tan grave para la comunidad como que su víctima no asuma este papel. Mencionarán «cosas positivas» en él y «defectos y errores» en la víctima, a quien se considerará como a las mujeres feministas: excesiva en su respuesta a la violencia recibida.
La violencia del silencio es abyecta, si bien tiene la ventaja de dejar sin duda alguna más espacio que el que te arrastren de los pelos a la plaza pública para condenarte.
Martin Luther King decía: «Los que (en masculino, claro, como siempre: el mundo concebido desde el patriarca y dirigido a los patriarcas) aman la paz deben aprender a organizarse con tanta eficacia como los que aman la guerra». Lo sé porque su mente no tenía nada de inteligencia feminista. El día de celebración cuando dio el discurso «I have a dream» Tengo un sueño, no dejó que las mujeres dieran discursos ese día, a pesar de que Rosa Parks, presentada eso sí como ama de casa cansada y no como lo que era además, una activista, ya era «famosa». Les dijo que ya les organizarían un día para ellas. Es decir, Martin Luther King era un patriarca, como Gandhi, y no podían ni concebir que quizá las mujeres activistas que les rodeaban (vistas siempre como eficaces secretarias o ayudantes) pudieran ser pensadoras y pudieran tener buenas ideas sobre cómo proceder para generar procesos noviolentos eficaces para transformar la sociedad. Ahora tenemos el movimiento feminista y la gente sigue sin ver su conexión con la lucha noviolenta más eficaz. ¡A desarrollar inteligencia feminista! ¡que seguimos sin terminar de arrancar! A dejar de tener miedo a las mujeres que piensan, hostias! A dejar de subestimarlas, desvalorizarlas, demonizarlas. Pesadez infinita, estupidez máxima! ¡QUE NO TENEMOS EL CHICHI PARA FAROLILLOS!
Cómo se perpetúa la invisibilización de ciertos tipos de violencia
Monólogos del Patriarca
Es violento que nos grites, una agresión a nosotros y a la comunidad. No hay motivo, nadie ve que haya motivo, no son formas. No, el contenido es irrelevante y tus motivos, porque no hay justificación. Gritas porque eres excesiva e irracional. Eres la única que grita. Nunca antes habíamos tenido problemas así hasta que llegaste tú. Jamás hemos tratado mal a nadie, jamás hemos sido injustos o forzado situaciones, jamás reflejamos nuestros miedos y problemas personales en nuestro trabajo. Cuando tenemos problemas es porque la gente no comprende el peso que llevamos, que el respeto tienen jerarquías, como los derechos: hay gente que debe necesariamente tener más.
Nosotros no generamos problemas. Tú sí generas problemas, protestando sin motivo… Por eso nadie escucha lo que dices. No nos interesa. No nos interesa lo que diga alguien como tú, que grita.
Y tenemos que hacerte daño porque nos obligas, no es por gusto. Nos obligas.
HISTORIAS DE MI MADRE. Bueno, ahora me voy a echar un partida de póker online (con dinero de mentira, eso sí). Me recuerda a mi adolescencia tardía y primera juventud. Mi madre organizaba timbas en casa con mis amigas y amigos o con quien pilláramos. Empezábamos con 5 pesetas, y a veces apostábamos 25 ptas. O sea, jugábamos de dinero, aunque eran cantidades pequeñas. Jugamos también mucho con la gente que trabajaba en el circo, cuando venían a Madrid, el Price. Con buffalo bill y el domador de monos y el de leones, y la troup de acróbatas búlgara. A mí eso me divertía pero me ponía triste el circo y ya sé por qué, claro. Volviendo a mi madre y las timbas de póker, suena fatal pero era lindo e inocente. Me decía siempre, «Si tienes candidatos, tráetelos. Si no saben perder, no te líes con ellos», jajajaja… Mi madre fue adelantada a su época. Me dijo a los 16 lo que necesitaba saber para no quedarme embarazada. Yo entonces tenía como 10 años mentales y me parecía asquerosa la idea de besarse con las babas en la boca con nadie!! También me dijo algo que siempre he creído me salvó de muchas cosas: No tomes drogas con gente que no te quiera de verdad, y si las tomas, sólo pruébalas, no tomes la dosis que tomen quienes te las ofrecen. Cuando lo pienso, me admira. Ella sabía que yo volaría pronto y seguro que aunque temiera mucho que me pasara algo, temería más cortarme las alas. Y pobre! Siempre vivió con el complejo de ser una mala madre, con ese peso insoportable, y teniendo que escuchar a la gente decirla que una madre nunca haría todo aquello que hizo. Cuando me envió a las antípodas porque me preguntó y yo quise, para aprender inglés, la llamaron «mala madre», dijeron que quería «librarse de tener que cuidar a la niña». Qué barbaridad. La violencia patriarcal y sus caminos inexcrutables! Pues voy a echarme un poker! Para despejar la mente antes de irme a descansar. Y un abrazo a la gente que no ve cosas raras en las cosas inocentes y/o sabias.
Violar, aterrorizar y matar el Hombre a las mujeres.
Patriarcado, torturador asesino, padre de todos los sistemas de violencia que conocemos. Basta!
25 nov 2014
Expresarle a las personas el valor que les damos, lo que las apreciamos podrá hacer que se sientan halagadas, aunque lo normal es que haga que se sientan queridas y apreciadas, que no es lo mismo, pero sin duda alguna no es lo mismo que halagar, es algo mucho más hondo, empático, de relación humana, y no algo tan trivial y dañino como el halago que se le enseña al Hombre a hacer en el patriarcado.
En el patriarcado se le dice al Hombre que debe halagarlas con regalos y palabras. ¿Para qué? Aquí aparece otro de los elementos distorsionantes y desagradables del «halago» (a parte de que está claro que es unidireccional: del Hombre a las mujeres): para que les den placer sexual o en el más permanente de los casos ¿amor? (el unidireccionalismo se ve en que si le damos la vuelta, no es lo mismo. Las mujeres deben respetar al Hombre, admirarse de sus méritos reales, y ahí está el sistema de héroes y tal, no hace ninguna falta que se le digan tonterías huecas; también porque Él manda en realidad respecto al sexo, por eso durante siglos si ellas no querían sencillamente las violaba y eso se consideraba «seducir», no tortura). Halagar a alguien no es valorar y apreciar a alguien y hacérselo saber, al menos no en el patriarcado: a las mujeres hay que halagarlas para «llevárselas al huerto», «tener la llave a su corazón», como dicen metafóricamente (porque si fuera eso la llave a que te quieran, qué cosa tan insignificante serían las mujeres!, como lo que nos han dicho durante siglos contra toda evidencia!; y si es metáfora de su vagina, ya sabemos, es siempre lo mismo, y encima consideran de mal gusto que lo denunciemos).
Toda esta ideología es machista y misógina. Las mujeres son personas con mentes humanas, no niñas caprichosas a las que hay que engatusar para que te obedezcan o hagan lo que quieres.
Si el Hombre quiere «comprender a las mujeres» bastaría con que empezara a desarrollar inteligencia feminista para limpiar su mente del dogmatismo patriarcal, y así vería que la mente humana es impresionante y compleja y que los genitales no determinan su desarrollo. Con cada «no comprender» suyo se nos está diciendo: «sois caprichosas, hay que manipularos para sacar algo bueno de vosotras». Como a «los indios» con las cuentas y los cristalinos. Cruel la ideología patriarcal, violenta en extremo.
Valorar a las personas es algo que necesita cualquier persona, hacerlo y recibirlo. Engañar, engatusar, manipular, cosificar, usar estrategias es algo que necesitan hacer quienes no pueden sentir empatía hacia quienes tienen delante, esa inteligencia.
Si quieres que te quieran, aprende a querer, a valorar a las personas, y no a tratarlas como si no fueran personas (como si fueran muñecas). (Hay que ver qué afición tiene el hombre patriarcal a jugar con muñecas, qué obsesión con forzar a otras personas a ser sus muñecas!) La igualdad va de mirarse las personas a los ojos y hablarse como personas, no de juegos de poder.
No. Lo que quieren es que no puedan ser amables sólo los hombres y hacia sólo las mujeres. Quieren que todo el mundo, que cualquiera pueda ser amable. Que un hombre pueda abrirle una puerta a otra persona, sin importar sus genitales ni las posibilidades de acostarse con ella. Que una mujer pueda cederle el asiento a otra persona si quiere.
Las feministas hacen por tanto una crítica racional empática al tema de la galantería, que combaten por su machismo y misoginia, pues se cosifica a la mujer en cómo se la concibe y en cómo se la trata y por tanto se degrada o caricaturiza la relación.
Desde la inteligencia feminista, luchamos por ser amables como gesto de cuidarnos y mimarnos las personas, y no como mecanismo para codificar a la gente y conseguir cosas de ella. La amabilidad es un rasgo humano no del Hombre.