ODIO A LA EDUACIÓN. Que en España esto es lo que ha habido, hay y posiblemente habrá lo ilustran infinidad de cosas que sabe el profesorado de la pública especialmente bien. Pero el caso del investigador de Podemos es un buen ejemplo. Para mí el caso más grave es que han convertido los instis en cárceles para el profesorado y el alumnado. Sin libertad, la libertad que te permitía decidir antes si faltaba una profe, si quedarte con un grupo en clase (hablando bajito porque si no el bedel de planta te echaba y tenías que ir al patio), si ir a la biblio a ponerte al día al fin, o a la cafetería a aprender a relacionarte, o al patio, a lo mismo, o incluso a jugar a algo físico, todo actividades vinculadas a practicar la comunicación humana y la empatía, eso que nos acompaña tanto y que es de lo poco que nos informa sobre el valor real de las relaciones humanas, con trabajos para padres y madres de todo el día fuera de casa, y sus nefastas decisiones de asegurarse de que sus hijos e hijas jamás tengan un rato libre para aburrirse y quedar con gente sin estrés para estar ahí con la gente, aburriéndose en comandita o no, se ve que una persona adulta no puede educar a una persona menor y van y se lo cuentan al profesorado, culpabilizándolo de la situación en realidad. Y dan ganas de decirles: Pues si dejáis de considerar la educación como una guardería y pedís a los políticos que hagan políticas educativas y no de guardería, porque os siguen la estela, esta estela autoritaria que os traéis, de desprecio histórico y odio a la cultura y la educación, de no entender lo que es la cultura y la educación y la investigación y no querer escuchar ni entender, aprenderlo, y nos dejáis hacer nuestro trabajo, quizá os llevéis una sorpresa, porque el hecho es que en este país en la pública hay muchas personas que sí saben educar. Pero no: visitad el blog de profes que se atreven a analizar la realidad. Sus posts estarán llenos de insultos y distorsiones demenciales, las clásicas: que se quejan mucho y cobran muy bien y encima tienen muchas vacaciones. Es una IGNORANCIA salvaje y esclavista, de no querer pensar, ni razonar, de no ver que si la educación primaria y secundaria de un país estrangula al profesorado, la sociedad se vuelve más violenta y más incapaz de razonar y negociar y convivir. Y sólo aprende lo que se la enseña: la imposición. Y no se aprende lo único que nos salva de la violencia total: la comunicación, la compañía.
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