La razón por la que se enseña a las niñas y los niños a reprimir la espontaneidad, evitar la sinceridad y cortarle las alas a la creatividad es porque no se quiere que llamen la atención en el grupo, para que así el grupo les proteja siempre. Esto es un pensamiento irracional, que nos afecta, pues seguimos insistiendo en ser irracionales (usar la violencia en lugar de la inteligencia). Es un pensamiento irracional pues para evitarles un daño posible se les causa un gravísimo daño y no es eso lo que la gente que cría a bebés queriendo pretende.
Sin espontaneidad, sin sinceridad, sin creatividad, se tiende a evitar expresarse. (Palabra, pensamiento, actitud y acción van unidas.) Esto coarta dos aspectos vitales del desarrollo de la inteligencia: el poder buscarse para ser en función del potencial propio, y el poder desarrollar el pensamiento crítico, destrezas que nos permiten discernir lo bueno y lo que no lo es en función del razonamiento (la cabeza-corazón), de la vida viva, y no en función de la tradición (normas del grupo), la vida muerta.
Bebés del mundo, os quieren, no hay duda alguna, pero no toman las decisiones más inteligentes (por miedo a que sufráis, os convierten en bonsáis).
No tener la oportunidad de ver el sol
No poder aspirar a la luna
Significa no tener la oportunidad de tener sueños y ser feliz
(lo que se les niega a las personas en pobreza, pues quien sufre violencias varias, lo tiene difícil para imaginar y tener sueños)
Más nos vale un bebé libre, que cientos amasados.
Os deseo mucha suerte.
Por un mundo mejor.
Escribí esto en Facebook el 19 de diciembre, sintiéndome bastante mal por pensar que Haminetu Haidar iba a morir en su lucha. Al día siguiente, pareció cambiar todo, y finalmente está viva y en su casa.
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Como no puedo dormir, porque tengo a Aminatu Haida en la cabeza, se ve que la mente se ha buscado la vida y he escrito este pequeño pensamiento dedicado a los bebés… donde empieza todo.