¿Por qué en los programas de "presuntos debates" televisivos (Tómbola, Crónicas Marcianas, etc..qué nivel Maribel..) hablan todos a gritos, se insultan, hablan a la vez?

¿Por qué la gente cree que quien grita más ha "dejado por los suelos" a quien grita menos?

En esos debates, la gente no razona, habla con frases hechas que aplica al supuesto tema exista o no fundamento para aplicarlas.

Ejemplo:
-Si alguien quiere invalidar lo que otra persona ha... ¡gritado!, dice:
-Ya estamos hartos de ti.

Análisis: Usa el plural cuando en realidad se trata de su opinión singular. Lo que quiere transmitir no es una idea que refute o cuestione, sino un sentimiento de hostilidad: "somos muchos quienes te detestamos". Ni siquiera tiene valor para decir (que tampoco procede en un verdadero debate, claro): "te odio a rabiá". Tiene que "esconderse" en ese plural abrumador. A falta de argumentos, recurre al miedo irracional de las personas a sentirse minoría, o bien a ser blanco del no aprecio de la mayoría.

¡Hola a todos!

En esos debates, como en muchos otros lo que se trata no es de tener razón, sino de que nos la den, esto es, de tener razón ante los ojos de los demás (lo cual es muy distinto de tenerla efectivamente). Y dado que mucha gente se deja influenciar por la convicción de quien expresa una opinión, o por la indignación, como si eso fuesen argumentos, los que debaten en esos diálogos montarán el número que haga falta.
Si me permitís dejo a continuación unos pensamientos de Pascal sobre la vanidad y el orgullo humano que pueden ser ilustrativos.

Un saludo

AlphaCentauri

Pascal. "Pensamientos"

“Somos tan presuntuosos que quisiéramos ser conocidos por toda la tierra, e incluso por aquellos que vivirán cuando ya no existamos nosotros; y somos tan fatuos que el aprecio de cinco o seis personas que nos rodeen nos alegra y nos deja satisfechos”.

“Los filósofos mismos quieren admiradores; y aquellos que escriben contra la gloria quieren tener la gloria de haber escrito bien, y quienes les leen quieren tener la gloria de haberles leído; y quizá yo mismo, que escribo esto, también la quiero; y quizá aquellos que me lean.”

Hola, pues hablan a gritos, porque les importa más hacerse oir, que hacerse entender

Je crois