Carta de Nobel Latinoamericano a Bush
SERPAJ-AR <serpaj@serpaj.org.ar> escribió:
Sent: Friday, December 23, 2005
Sr. Presidente de los Estados Unidos
de Norte América
Sr. George Bush
Debo decirle que dudé mucho en volver a escribirle otra carta; no se si leyó la anterior que le enviara para la Navidad del 2004; pero más allá de su
lectura, señor Presidente, usted ha demostrado que no quiere escuchar nada más que a su grupo de poder para imponer su voluntad imperial a los demás.
Si he decidido enviarle otra carta, fue motivado por un ex Presidente de los EE.UU., Jimmy Carter, Premio Nóbel de la Paz; quien dice: "Ya me cuesta
reconocer a estos Estados Unidos".
Señala que " en estos últimos años, me sentí cada vez más preocupado por muchas políticas de gobierno que amenazan hoy principios básicos. Entre éstos
figuran el compromiso con la paz, la justicia social y económica, las libertades civiles, nuestro medio ambiente y los derechos humanos,... peligran
también compromisos históricos, vinculados con facilitar a los ciudadanos información veraz, respetar las voces del disenso." Y Carter continúa
señalando y denunciando que: "Nos hemos convertido en los principales culpables de la proliferación nuclear, invalidando y derogando casi todos los
acuerdos sobre control de las armas nucleares..." y que " hacen denodados esfuerzos los dirigentes políticos para ejercer un dominio imperial en todo
el mundo".
La gravedad de las afirmaciones de Carter llevan a una real preocupación sobre el rumbo que su gobierno está llevando. El ex - presidente señala con
toda claridad "que todas esas políticas fueron orquestadas por aquellos que creen que el tremendo poder de EE.UU. no debiera limitarse". Hace
referencia a la frase que usted señalara: "Están con nosotros o en contra nuestro", y dice que su gobierno "reemplazó la formación de alianzas basadas
en una comprensión clara de los intereses mutuos, incluida la
> amenaza del terrorismo". De mayor preocupación es el hecho que > los EE.UU. repudiaron los Acuerdos de Ginebra y abrazaron el uso > de la
tortura en Irak, en Afganistán y Bahía de Guantánamo.
> Resulta molesto ver que el presidente y el vice-presidente insisten > en que la CIA debería tener la libertad para perpetrar "un trato o >
castigo cruel, inhumano o degradante" contra personas que se > encuentran bajo la custodia de EE.UU. Entre otras cosas Jimmy
> Carter muestra su preocupación por lo que llama un "cambio > fundamentalista en muchas casas de culto y en el gobierno a > medida que la
Iglesia y el Estado se fueron interrelacionando cada > vez más".
> Hasta ahora, en la carta, no he hecho otra cosa que transcribir las > declaraciones y preocupaciones del ex presidente Jimmy Carter, a >
quien, lamentablemente, le cuesta reconocer a su país > transformado en un imperio.
> ¿Hacia dónde va señor presidente Bush? Usted está arrastrando a > su país y al mundo a situaciones límites; está cruzando las > fronteras
de lo posible y transformándose en un peligro para la > humanidad, en ese afán por identificar a todos los que se oponen a > sus deseos como
terroristas, cuando es su política la que aplica el > terrorismo de Estado, con los mismo mecanismos que utilizara > durante las dictaduras
militares en el Cono Sur. Recordemos el > Plan Cóndor, y los métodos aberrantes como el secuestro y la > desaparición de personas. Hoy muchos
países europeos > reclaman explicaciones al Departamento de Estado, por utilizar > sus territorios y aeropuertos para los traslados clandestinos
de
> secuestrados por la CIA y llevados para someterlos a las torturas > en otros países.
> A pesar de todo, habla de democracia. Y pretende imponer, diría
> mejor, la "democradura", en elecciones dirigidas, en Irak. Las
> elecciones no garantizan la democracia, si son impuestas bajo el
> terror de las tropas de ocupación. Y por otra parte desconoce las
> resoluciones de las Naciones Unidas. Son muchas las violaciones
> cometidas y los crímenes de lesa humanidad de los cuales es
> usted responsable. Sería una larga lista de delitos cometidos, no
> es la intención de ésta carta señalarlos, pero son conocidos y
> sufridos por los pueblos.
> Entre las resoluciones de la Asamblea General de la ONU, por
> mayoría abrumadora, con sólo cuatro votos en contra, y 196 a
> favor, votaron para que levante el bloqueo a Cuba Pero su sordera
> intencionada, y soberbia, desconocen la resolución de la
> Asamblea General y continúa con el bloqueo e instala bases
> militares en el mundo y en América Latina, somete a gobiernos y
> los extorsiona para que permitan el ingreso de tropas
> norteamericanas, como en Paraguay, en Centroamérica, Ecuador
> y Colombia, entre otros. Ha invadido países como Haití, junto con
> Francia y Canadá y después reclama a la ONU el envío de tropas
> de otros países que suman actualmente más de 7400 efectivos,
> entre ellas, lamentablemente, tropas latinoamericanas.
> Jimmy Carter lo dice con mucha claridad. Ud. ha transformado a
> EE.UU. en un Estado terrorista, lo mismo que sus cómplices Blair
> y Berlusconi.
> Creo, Señor Presidente, que el pueblo de los EE.UU. debe
> ponerse de pié y pedir su renuncia y procesarlo por crímenes
> contra la humanidad. Usted no es digno de dirigir a ese país, que
> sabe de luchas sociales, de construir nuevos caminos.
> El pueblo de EE.UU. tuvo épocas de fuerte participación social.
> Se opusieron a la guerra en Vietnam; asumieron la lucha por los
> Derechos Civiles que lideró Luther King; hubo grandes
> movilizaciones de rechazo a la Escuelas de las Américas, entre
> muchas otras gestas heróicas de resistencia social, cultural y
> política. No puedo dejar de recordar a Henry Thoreau, quien se
> niega a pagar impuestos, injustos, que iban a ser utilizados en la
> guerra contra México y asume la cárcel antes de ceder a las
> injusticias; los trabajadores en Chicago reclamando sus derechos
> y muchísimas otras manifestaciones de rechazo a las injusticias y
> desvíos del poder, entre ellos exigirle la renuncia al presidente
> Nixon.
> Por último Señor Presidente, le pido, le exijo, le reclamo, deje de
> agredir y violar los derechos humanos de las personas y los
> pueblos. Usted tiene la obligación de respetar y contribuir con su
> gobierno para atender a los más necesitados, la pobreza, el
> analfabetismo y la discriminación racial, y a los inmigrantes en los
> EE.UU. Es urgente abolir la pena de muerte, pues nada han
> logrado con matar a más de 1.000 presos, sólo sumar más
> muertes y no lograr disminuir los delitos.
> Es necesario que libere a los cinco prisioneros cubanos acusados
> injustamente de terrorismo, y que respete el derecho de sus
> familias a visitarles. La Corte de Justicia de los EE.UU. ha
> determinado serias irregularidades en el proceso.
> Es necesario que termine con los ataques contra Venezuela, en
> particular contra su Presidente Hugo Chávez. Es necesario que
> cambie su política de querer imponer a otros países sus
> condiciones. El fracaso que tuvo en la Cumbre de las Américas en
> Mar del Plata, Argentina, al intentar imponer el tratamiento del
> ALCA, a pesar del apoyo de México y Chile, le tiene que hacer
> reflexionar que los pueblos no son manejables y pasivos, tienen la
> fuerza y presencia para que se respeten sus derechos.
> No debe olvidar que hay nuevos emergentes sociales, culturales y
> políticos en el continente y el mundo, es necesario transforme su
> agresión en cooperación, su violencia y carrera armamentista, en
> proyectos de desarrollo para la vida y no para la muerte.
> No sé si tendrá el coraje de leer esta carta o seguir su camino
> autista, de todos modos le pido que lea las declaraciones del ex
> presidente de los Estados Unidos, Jimmy Carter, que transcribo en
> ésta carta, creo que le ayudarán a comprender y corregir caminos
> equivocados.
> Siempre existe la Esperanza. Los cambios son posibles. Un
> Nuevo Año significa la renovación y la posibilidad de construir
> nuevos caminos.
> Le saludo con Paz y Bien.
Adolfo Pérez Esquivel
Premio Nóbel de la Paz
Buenos Aires, 23 de diciembre del año 2005
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