Activismo - Feminismo - Derechos reproductivos
Aborto en EEUU y cuestión derechos reproductivos son ¡derechos humanos!
Mujer Palabra
En Estados Unidos, el Tribunal Supremo acaba de retirar una libertad fundamental garantizada por la Constitución estadounidense en su enmienda número 14, que afecta a las mujeres que pueden quedarse embarazadas. Aportamos alguna información, con anotaciones también sobre el lenguaje, pues los documentos administrativos y legales requieren plantearse la superación del lenguaje andrógino, y comentamos.
Para la superación de la misógina cultural patriarcal , por los derechos humanos de las mujeres
Con la recuperación de la historia de la mujeres (trabajosa e insistentemente ignorada hoy también), donde sabemos cuánto han muerto, sufrido y sido privadas de su criterio las mujeres, cuánto se las ha estigmatizado, dado la espalda, torturado, difamado, sobreexplotado, abandonado, las más de las veces por el gran invisible: violaciones por hombres conocidos y desconocidos, solos o en grupo, en su catálogo infinito que va de no percibirlas como tales al horror más indescriptible; y la “promoción” de esta media humanidad a “persona” en el imaginario de una mayoría de la población (lo que no significa que hayamos superado la ideología patriarcal que nos hace perpetuar lo androcéntrico, la misoginia y el machismo), hoy en día es más fácil empatizar [el procesador de textos no deja agregar esta palabra al diccionario] con el hecho de que si una persona se queda embarazada sin desearlo, es TORTURA FORZARLA A GESTAR Y PARIR, y CRUELDAD generar así una maternidad forzada y una “familia desestructurada” (condenada a la pobreza, ese crimen contra la humanidad que tan poco importa a líderes de las estructuras que organizan las sociedad, tan cuidadosas con quienes acaparan infinitamente más de lo que pueden disfrutar) cuando no se acabe dando a la personita en adopción forzada o en otras tragedias y fuentes de sufrimiento sin fin.
Información del Center for Reproductive Rights de Estados Unidos
Protección Constitucional al Derecho al Aborto: Casos de Roe [1973, contra Wade], Casey [1992, Parenthood of Southeastern Pennsylvania v. Casey] y Salud Integral de la Mujer [2016, Whole Woman’s Health v. Hellerstedt]. [Estos tres casos definen la protección constitucional del derecho de una mujer al aborto en Estados Unidos.]
Con la decisión histórica que sentó jurisprudencia, caso de Roe v. Wade, 410 U.S. 113 (1973), el Tribunal Supremo reconoció que el derecho al aborto es una libertad fundamental protegida por la decimocuarta enmienda* de la Constitución [estadounidense]. Desde el caso Roe, el Tribunal ha confirmado repetidas veces la protección que la Constitución ofrece a esta libertad fundamental, garante del derecho a tomar decisiones personales sobre familia y si se desea o no gestar y parir.”
Original en inglés: Constitutional Protection for the Right to Abortion: From Roe to Casey to Whole Woman’s Health. In its landmark ruling in Roe v. Wade, 410 U.S. 113 (1973), the Supreme Court recognized that the right to abortion is a fundamental liberty protected by the Fourteenth Amendment of the Constitution. Since Roe the Court has repeatedly reaffirmed the Constitution’s protection for this essential liberty, which guarantees each individual the right to make personal decisions about family and childbearing.
*Enmienda XIV (Ratificada en julio 9, 1868) Con ADNV Lenguaje de mujerpalabra.net Sección 1. Todas las personas nacidas o naturalizadas en los Estados Unidos y sometidas a su jurisdicción son ciudadanos [“personas” concuerda en FEMENINO. ¡Qué rechazo!] de los Estados Unidos y del Estado en que residen. Ningún Estado podrá dictar ni imponer ley alguna que limite los privilegios o inmunidades de los ciudadanos las personas de los Estados Unidos; ni podrá Estado alguno privar a cualquier persona cualquiera de ellas de la vida, libertad o propiedad sin el debido proceso legal; ni negar a cualquier persona que se encuentre bajo su jurisdicción igual protección de las leyes.
Original en inglés: No State shall make or enforce any law which shall abridge the privileges or immunities of citizens of the United States; nor shall any State deprive any person of life, liberty, or property, without due process of law; nor deny to any person within its jurisdiction the equal protection of the laws.
Traducción: m. renyé, para mujerpalabra.net
Más información: Artículo del 24 de junio 2022 en
https://reproductiverights.org/supreme-court-takes-away-right-to-abortion/
y Hoja Informativa de la cuestión legal, de la que se extrae la cita traducida, en https://www.reproductiverights.org/sites/crr.civicactions.net/files/documents/factsheets/Constitutional-Protection-for-the-Right-to-Abortion-Fact-Sheet2.pdf
Tenemos una pregunta, pues desde hace décadas preguntamos a las Naciones Unidas por qué no actualizan el lenguaje (los conceptos, los textos) de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que es de 1948, dado el inmenso cambio positivo de la sociedad en la comprensión de la identidad y la convivencia humanas. [Ver https://www.mujerpalabra.net/activismo/herramientapalabra/derechoshumanos/ADNVLenguaje_DDHHONU.html]
La cuestión es que la Declaración de DDHH (tan ignorada, en cualquier caso, aunque ahora dado su desfase, da un poco igual, para la desgracia de las poblaciones) debería incluir los derechos humanos de todo el mundo, y el grupo de personas con capacidad de gestar en SU cuerpo requiere de esa protección, porque son PERSONAS, no objetos para la reproducción de la especie.
Las mujeres con capacidad de gestar NO son contenedores, aunque la tradición que tenemos metida en la cabeza culturalmente nos lo diga y repita (pensar críticamente nos ayuda a corregirnos), aunque hayan sido consideradas durante siglos productoras de descendencia y manos para trabajar para quienes creen que hay personas inferiores que deben servirles. Personas con las que no pueden convivir como iguales, ni trabajar ni colaborar por el bien de todo el mundo, porque sufren egocentria validada culturalmente, hoy diríamos que carente de empatía a niveles enfermos. Cierto que hoy le sigue pareciendo a parte de la humanidad (una parte mucho menor de lo que parece) que se les puede IMPONER la gestación o la esterilización a mujeres con capacidad de gestar. Siguen la irracional “idea” cultural de que lo que importa es si el Hombre (el varón de la sociedad patriarcal definido por el sistema sexo-género patriarcal) quiere tener descendencia (que aunque no se ocupara ni le importara, siempre le ha gustado ir dejando mujeres preñadas por ahí, como sabemos de sobra), o no quiere que un grupo humano la tenga (decisiones “políticas”). Porque estos han sido siempre los temas que mueven la creación de historias dogmáticas para la justificación de la violencia hacia grupos humanos.
Las pruebas históricas y cotidianas se nos salen ya por las orejas, de que la procreación y el cuerpo de las mujeres son propiedad y cosa del Hombre en la sociedad patriarcal. Y la empatía, que se puede desarrollar (ya demostrado empíricamente), ofrece abrumadora cantidad de información en la vida cotidiana, si se quiere mirar la realidad. Bastaría dejar de malpensar, de pensar, por ejemplo, que “las mujeres” son “malas por naturaleza” o “en el fondo” o “bobas y triviales” o “unas salidas irresponsables”.
Somos humanas, los genitales no nos impiden ser humanas, y podemos ser cualquier cosa humana, según nuestras mentes-corazón, educación, deseos, lo que se espere de nosotras, todo, todo lo que es humano.
FORZARNOS a gestar, parir y a la maternidad es TORTURA, y se deben registrar y respetar los DERECHOS HUMANOS de las MUJERES CON CAPACIDAD GESTANTE, igual que por mucho que necesitemos o queramos ayuda, no podemos esclavizar a nadie, que eso es crueldad e injusticia.
Quedan temas íntimamente conectados, de la violación y su parque temático de lo invisible al horror, la educación sexual y el placer en nuestras mentes taradas de violencia pero capaces de evolucionar y aprender, a la parenthood (ser persona que cuida a dependientes menores) y la familia. Pero basta por hoy. Es urgente que se entienda que no podemos seguir diciéndole a las mujeres que no pueden decidir sobre si quieren gestar y parir, y forzándolas a la maternidad o a dar en adopción.
Fue la colaboración la que nos sacó con vida de la prehistoria. Las mujeres participaban en las cacerías si querían, porque participaba quien podía y quería, los hombres pintaban en las cuevas también, o recolectaban también. Y las personas pequeñas ayudaban en sus capacidades.
¡Basta de violencias! ¡Saturadas de violencia! ¡Respeto, colaboración, racionalidad y empatía!
¡Inclusión como derechos humanos fundamentales de los derechos reproductivos para quienes gestan en su cuerpo YA!
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Publicado en mujerpalabra.net el 25 febrero 2022