Creadoras - Griselda Gloria Fernández (ggf)
La casa rota (cuento)
Se levantaba trastabillando sobre sus estructuras maltratadas, mirando desde el hueco oscuro y endemoniado de sus profundidades.
Los árboles y los pastos iban apropiándose lentamente de sus elementos. La rodeaban y clavaban en cada molécula sus raíces.
Rota llegó despues de mucho caminar, con el largo vestido enganchado en los yuyales y el sombrero ladeado, y las mechas sueltas y transpiradas, la cara, el cuerpo todo, lleno de tierra y sudor.
Llegó apoyándose en el bastón y se quedó mirando el frente tosco y abandonado.
Buscó una piedra cercana y se sentó resoplando.
Eso era lo que había vuelto a su vida: una helada y fantasmal cosa de la que nunca pudo desprenderse, un peso astronómico.
Los monstruos asomaban por las ventanas sus ojos rojos y parecían reírse de ella.
Pero esto era algo con lo que tenía que terminar y no podía dejarlo ahí. No era suficiente con irse. Su propio poder tenía que echar abajo las embrujadas estructuras que ya se sacudían anticipándose.
Respiró lo necesario.
Hizo de tripas corazón.
Se levantó.
Y puso un pie delante del otro, hasta la puerta, que se resistió porque sabía lo que se venía con esa alma perteneciente a su pasado atormentado.
Lentamente comenzó la letanía, y acercó la llave oxidada.
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Publicado en mujerpalabra.net en febrero 2022