Creadoras - Poemas y canciones
No soy un grano de anís
michelle
Escucha el poema
A Xeli
1987, Guatemala
No soy un grano de anís
dijo la niña y se llenó
de flores y de verdes,
de lagos y volcanes,
de montañas.
Como una diosa dijo
no soy un grano de anís,
y de sus manos mullidas
volcaron telares, arados,
cántaros, caminos.
Te vi cargar a tu hermanito
atado a la espalda, cargar
la leña, acarrear el agua,
alimentar el fuego
de la cocina.
Te vi observar el cuerpo
torturado en la plaza
bajo el sol
y restregarte el horror
de los ojos.
Te vi esperando
a que todos hubieran comido
para comer tú,
que no eres un grano de anís.
Eres una niña, bella y fuerte,
como los cristalitos que quieres
para tus orejas.
Eres una niña en un país en guerra
y nunca te amaré como si fueras
un grano de anís.
Notas al poema: Xeli era una niña ixil en 1986 en Guatemala. La frase "No soy un grano de anís" la tomé de la novela de la mexicana Rosario Castellanos, Balún Canán:
No soy un grano de anís. Soy una niña y tengo siete años. Los cinco de la mano derecha y dos de la izquierda. Y cuando me yergo puedo mirar de frente las rodillas de mi padre. Más arriba no. Me imagino que sigue creciendo como un gran árbol y que en su rama más alta está agazapado un tigre diminuto. Mi madre es diferente. Sobre su pelo –tan negro, tan espeso, tan crespo– pasan los pájaros y les gusta y se quedan. Me lo imagino nada más. Nunca lo he visto. Miro lo que está a mi nivel. Ciertos arbustos con las hojas carcomidas por los insectos; los pupitres manchados de tinta; mi hermano.
Este poema es del libro De la sangre (1999), que finalmente quedó incluido en el libro Memoria de Ilt (versión 2009, descargable en el blog Tu muerte en mis sueños, y los animales ).
Información sobre uso de este material: ver licencia de Creative Commons
Publicado en mujerpalabra.net en el verano del 2010