Creadoras - Obra gráfica y escénica

Versión imprimible Creadoras en MP: Aguijones dionisíacos (9 págs.)

yo las he aguijoneado fuera de sus casas enloquecidas,
y con la mente enajenada habitan en el monte,
las he obligado a llevar el atavío de mis orgías,
y a toda la ralea femenina de Tebas, cuantas mujeres había,
las he arrastrado locas fuera de sus casas.

PRÓLOGO

Delante del telón cerrado apareceré una mujer que presentará la pieza.

MUJER: Hay mujeres que cocinan, que limpian, que cosen, que trabajan, que estudian, que son quemadas por sus parejas o exparejas, que son maltratadas en sus hogares o en sus trabajos. Mujeres alegres, que cantan y bailan. Mujeres de fiesta. Mujeres que abortan clandestinamente y se meten cientos de pastillas por la vagina para que les revienten dentro. Mujeres que sufren, mujeres que desean libertad, mujeres que se afanan por una vida digna de ser vivida. Mujeres que desaparecen y en las sombras de las sombras dejan a un lado sus deseos para satisfacer los deseos y las lujos de otros. Mujeres que desean, que vuelan. Mujeres que dan calor. Mujeres que son violadas y anidan en su tierra el dolor y la injusticia. Mujeres que paren hijos condenados al hambre. Mujeres que trabajan juntas, que se reúnen, que luchan. Mujeres que se casan y son felices, mujeres que no se casan y son felices, mujeres que reinan en un hogar lleno de amor, mujeres que danzan con sus vientres llenos de vida. Mujeres que son ternura y paz para otros. Las conocés: a todas. (Sale)

ACTO ÚNICO

Bar, tres mesas, en cada una de ellas está sentada una mujer bebiendo.
Atrás una máquina para pasar música. Sobre esta una pantalla.
A la derecha, Paula, es lesbiana, tiene 22 años, toma un aperitivo.
En el centro, Erika, es una travesti sumamente femenina, tiene 38 años, toma whisky.
A la izquierda, Luz, es hetero, tiene 26 años, toma cerveza.

Las luces están apagadas, Erika comienza a cantar muy suavemente, tiene una hermosa voz, junto con su canto va subiendo la luz casi cenital que la alumbra.
ERIKA: /Quiero emborrachar mi corazón/para olvidar un loco amor/
(La luz de Paula va aumentando levemente y se une al canto, ambas miran al infinito)
PAULA y ERIKA: /que más que amor es un sufrir/
(Se suma Luz a este canto)
LAS 3: /y aquí vengo para eso/
(Paula y Luz beben, Erika continúa)
ERIKA: /A borrar antiguos besos/en los besos de otras bocas/
(Las tres beben, continúa cantando Luz)
LUZ: /si su amor fue flor de un día…/
LAS 3: ¡de un día!
LUZ: /¿por qué causa es siempre mía/esta cruel preocupación?/
LAS 3: /quiero por los dos mi copa alzar/
(Alzan las copas, brindan con nadie)
/Para borrar mi obstinación/
(Paula y Luz resoplan y luego las tres, cada una a su tiempo, recita la frase final)
Y más la vuelvo a recordar…
(Bajan las luces de Luz y de Paula, resalta la luz de Erika)
ERIKA:Lo conocí en un cine, estábamos a una butaca de distancia, él estaba de traje, hermoso, recién salidito de la oficina. Yo había tenido una noche terrible el día anterior y me había pasado el día durmiendo y tomando ginebra. Cuando me di cuenta de eso salí, necesitaba aire fresco (respira profundo) además sabía que los miércoles a esa hora en el cine de Corrientes siempre había uno o dos nuevos (sonríe, se tilda en el recuerdo) llegan tímidos, con la cabeza mirando al piso o al celular que pusieron en vibrador por si los llamaba la mujer. Lo sacan y lo guardan, lo sacan y lo guardan, ¡en el orto tendrían que guardárselo! (ríe estruendosamente, bebe). Y sí, ahí estaba nomás, mirando para todos lados como si lo persiguieran. Se sentó en mi fila, a unas dos butacas (sonríe pícara) me miró y yo le sonreí, él bajó la mirada por un rato, después miró fijo la pantalla. Ahí los chicos se divertían, nosotros no. Así que me acerqué, a cada butaca que yo me movía él transpiraba más y más. (Bebe) Los nuevos se ponen tan nerviosos… Llegué al lado él, lo miré y no se corrió, lo tomé como un sí, así que miré la pantalla y le toqué la pija.
(Suben levemente las luces de Paula y Luz, las tres cantan)
LAS 3: /hermano, yo no quiero rebajarme, ni pedirle, ni rogarle…/ (susurran) ni decirle que no puedo más vivir (beben)
(Bajan levemente las luces de Erika y de Paula seguirán bebiendo y bailando junto a la máquina de música mientras habla Luz)
LUZ: (habla muy rápido, le grita a alguien en bambalinas) Vane… ¡Vane! No me siento bien… (Vuelve al frente) No se ni para qué venimos a un canilla libre si sólo se puede pedir cerveza y esos daikiris de alcohol etílico que son explosivos estomacales… ¡Vane! (llorisquea) No puedo más, me siento mal ¡nadie me saca a bailar Vane!
(Paula elige un tema de la máquina: "It's raining men", Luz toma un trago más y canta y baila en la silla)
/It's raining men/Aleluya/It's raining men/Amen/
Dios, ojalá fuera tan fácil ¡estoy cansada de encontrarme con pelotudos, idiotas, infantiles! Y… (piensa) no se más insultos. ¿Qué estará haciendo Juani? (Mira su celular y escribe un mensaje, en la pantalla del fondo va apareciendo letra por letra el texto, Erika y Paula miran la pantalla)
Hola! en q andás? Como no me respondiste terminé en un bar gay! :P
(Erika ríe, Paula menean la cabeza)
Cualquiera está bien total nadie va a ser como Juani (hace fondo blanco con su vaso). ¡Que obsesión Dios! Pero ¡ay! esa polerita negra y ese corte semi-punk… Lo amé desde el primer día. Lo pálido que era le resaltaba los ojos marrón oscuro y esa nariz ¡Dios! Esa nariz era bella bella. ¡Quería tanto salir con él! Desesperadamente… lo perseguí a Alberto casi un mes para que concretara una salida grupal. A los dos meses de salir ya me quería casar con él, tener hijos y un perro. Pensábamos nombres… (llorisquea, mira su vaso vacío, grita) ¡VANE! ¿Me pedís otra? Lo quería abrazándome todas las noches. Pero no quiero hablar de él, realmente no quiero hablar más de él.
PAULA y ERIKA: (miran a Luz, con voz grave) Me parece que ya no te deseo, te dijo.
LAS 3: (cantan) /Hermano/yo no quiero rebajarme/ (se enojan, dejan de cantar, proclaman) ¡Ni pedirle, ni rogarle! (pausa, suspiran), ni decirle que no puedo más vivir…
(Bajan las luces de Erika y de Luz, queda Paula iluminada)
PAULA: ¡Me harta! está todo el día llamándome y preguntándome dónde estoy.
(Suena un ringtone con un tema de Erica García, en la pantalla aparece un mensaje)
Todavia tas en el bar? T extrño
Y si estamos juntas lo único que quiere es hacerlo. Y yo tengo otras cosas que hacer. ¡No es mi culpa que ella esté al pedo!, ¿o si? Yo quiero terminar mi carrera, conseguir un laburo mejor… Y encima mi vieja, desde Puerto Madryn─
LUZ y ERIKA: (gritan) ¿No estarás llevando a esa chica a la casa, no?
PAULA: ¡¿Y a vos qué te importa mamá?! (rebolea un vaso con hielos que hay sobre su mesa hacia bambalinas) ¡Si no vivís en Buenos Aires! Nadie te conoce acá mamá (bebe, desde bambalinas le devuelven el gesto con un baldazo de agua) ¡Sos nadie! ¡La mismísima nada! (vuelve a beber, golpéa la mesa, se escurre el pelo) Azul me ayuda en todo, me incentiva siempre a jugarme por lo que quiero, por eso me gusta estar con ella. Tendrá mil defectos pero siempre está ahí. Mañana vamos a empezar un seminario de actuación juntas (sonríe), estoy muy feliz de haberla conocido pero tengo miedo de cansarme, un año va ya, siento que absorbe todo mi tiempo (pausa), mi vida… (manda un mensaje de texto que aparece en la pantalla)
Má, como van ls cosas? Ls extraño…
(Se prenden las tres luces, todas miran fijo al infinito, breve pausa.
En la pantalla del fondo se suceden imágenes con estadísticas argentinas de feminicidios y de muertes por abortos clandestinos, mientras todas proclaman)
LAS 3: ¡Mujeres bárbaras, así aterrorizadas habéis caído al suelo! Habéis sentido, según parece, a Dionisos sacudiendo la casa de Penteo!
ERIKA:(a Luz y a Paula) ¡Mas levantaos!
LUZ: (al público) ¡Sosegaos!
PAULA: Y que no tiemblen vuestras carnes más…
LAS 3: (se encuentran en el centro) ¡Oh luz grandísima de nuestra danza báquica, con qué alegría te veo, después de la soledad!
(silencio, la pantalla vuelve a blanco y las tres vuelven a sus mesas lentamente, beben y hablan en susurros, mientras las luces de Paula y de Luz bajan)
ni decirle que no puedo más vivir…
ERIKA:Se puso como loco, cerró los ojos y suspiró profundo. Después de un rato de toquetearlo me acerqué despacito hasta su oreja y le susurré: "vení". Él abrió los ojos y me miró, le sonreí y otra vez bajó la mirada (ríe, bebe). Me lo llevé corriendo hasta el baño de arriba, lo tiré contra una puerta y se la empecé a chupar. Yo me metí la mano, no aguantaba más la calentura y cuando estábamos por acabar escucho: "subí, quiero tocártela" ¡Ay, dios bendito, mirá que puto que resultó el machito! (ríe estruendosa). Me paré y me la sacudió hasta acabar (gime suave), lluvia blanca sobre los azulejos rojos. (Pausa) "Dame tu número" me dijo, "¿y cómo lo vas a anotar?" "¿Cómo te llamás?" "Erika" le dije y se me quedó mirando, "pero no puedo guardarte como Erika" "Bueno, entonces Pablo, me llamo Pablo" (silencio). Anotó mi número y me dijo que él me llamaba, me puso una mano en el hombro y se fue. Me quedé en el baño algunos segundos, miré al piso: estábamos unidos por algo. Me fui silbando por Corrientes, estaba estúpidamente feliz, un imbécil que me pasó por al lado me susurró: "te parto al medio mami"
LAS 3: (gritan) ¡Yo no me parto bombón, SOY FLEXIBLE!
ERIKA: Me fui hasta Santa Fe y Pueyrredón y me encontré con La Cachi y con Tomás y su novia. Estaban los tres tomando cerveza. Lo quiero tanto a Tomás, ese pibe sí que la rema eh, porque hay que pasar desapercibido teniendo cuerpo de mujer y sintiéndose hombre. Nosotras no disimulamos, me ves y a la legua te das cuenta de que algo me cuelga pero los trans sí que la tienen complicada… En fin, me senté a tomar con ellos y terminamos cantando lo mismo de siempre…
(Las tres sonríen y levantan las copas, beben, cantan)
LAS 3: ya se que estoy pianta-a/pianta-a/pianta-a/nos ves que va la luna rodando por Callao/
(Se juntan en el centro, Luz y Paula llevan las copas en la mano, se abrazan)
LAS 3: que un corso de astronautas y niños con un vals/me baila alrededor/bailá/vení/volá
(Suben mucho más sus voces, Paula desafina pero se gasta la voz cantando)
LAS 3: ya sé que estoy pianta-a/pianta-a/pianta-a/yo miro a buenos aires del nido de un gorrión/y a vos te veo TAN triste/¡vení!/¡volá!/sentí…/el loco berretín que tengo para vos.
LUZ: ¿por qué será que me gustan tanto los hombres aniñados? Siempre me termino buscando chongos de jardín de infantes, "quien con niños se acuesta amanece empapado", me dice siempre Solange, ¡¿Dios, de dónde los saco?! (se golpéa la frente) Me dan ternura… Soy una estúpida. (Mira el celular, lo vuelve a guardar) El sábado pasado lo vi otra vez a Javier y me volvió a encantar. ¿Quién es Javier? un hippie roñoso que en una fiesta de adultos elige quedarse TODA la noche jugando con los hijos ajenos, porque no tiene los propios ¡claro! Eso sería demasiada responsabilidad para una mente libre… ¡Toda la noche! Bailó conmigo medio tema y después se fue a jugar a las escondidas con una nena de seis años. ¡Me ganó una niñita de seis años!, una borrega que no sabe ni qué es una toallita pero ya sabe cómo utilizar sus encantos para manejar a los hombres. ¡Que frustración! Nunca va a haber nadie como Juan (Resopla) ¿Soy yo o son ellos?
ERIKA y PAULA: ¡SON ELLOS!
(Las tres levantan las copas y brindan a la distancia, se apagan las luces cenitales y se prende una luz intermitente blanca, de fondo suena música electrónica y las tres bailan)
ERIKA:(al público y a las otras dos alternativamente) ¡Entonces corónate de serpientes! porque eso es lo que hacen las Ménades cuando están de fiesta.
LUZ: ¡Oh Tebas, nodriza de Sémele, corónate de yedra!
PAULA: ¡brota, brota en verde tejo de buen fruto, y danza!
LAS 3: (baja la música y ellas susurran) Y alrededor las varas libertinas consagra.
(Pausa
Vuelve la luz de Paula)
PAULA: envidio la soltura que tiene Azul para todo este tema… A ella no le importa ir por la calle agarrada de mi mano. A mí la mayoría de las veces sí, cuando voy al Instituto nunca llego agarrada de ella y le doy un beso en el cachete (pausa) No es que me de vergüenza pero… hace algunos días íbamos de la mano por la calle y dos tipos nos gritaron
LUZ y ERIKA: ¡MAMITAS!, ¿no nos invitan a la fiesta? (escupen en el piso)
PAULA: (llora) No supe qué contestar. Amanda me dice siempre que los putee, que les diga algo. Pero a mí no me da, no me gusta provocar a la gente. Además, ya estoy acostumbrada (suspira). Es bien cierto eso de pueblo chico infierno grande. Por eso me vine acá, a la ciudad cosmopolita, abierta, europea…
LAS 3: (a público) ¿Qué hacemos?
(Desde bambalinas les tiran papel picado de colores, las tres están inmóviles mirando hacia el frente)
LAS 3: (proclaman con fuerte voz) Profeta es este demonio, porque lo báquico y lo delirante tienen fuerza de oráculo: así, cuando el dios entra en abundancia en el cuerpo, decir el futuro a los embriagados hace.
PAULA: ¿correr?
LUZ: ¿luchar?
ERIKA:¿escupir?
PAULA: ¿gritar? (grita)
LUZ: ¿amar? (llora)
ERIKA:¡bailar! (prende la máquina de música y suena Lady Gaga, las tres bailan por todo el escenario y cantan sobre el tema)
LUZ: No quiero hablar de Juan. Te extraño tanto.
PAULA: No quiero estar de novia. Te amo tanto.
ERIKA: No me llames, soy libre. ¿Vas a volver?
LAS 3: Siempre fui tan ambigua.
(Imágenes de explosiones se suceden en la pantalla, Erika se sienta en su mesa y se limpia el maquillaje con una servilleta, Paula y Luz se besan en el fondo.
Entra un hombre y Erika se acerca a seducirlo, ambos salen por la derecha.
Paula y Luz salen tras ellos.)

EPÍLOGO

(Entra la mujer del prólogo con un trapo en la mano, limpia las mesas)

MUJER: Y así termina la noche, llena de fiesta, de llantos, de búsquedas, de frustraciones, de compañías, de abandonos, de cantos, de amores y desamores, de pétalos que son acero y suspiros que son eternos, de alcoholes que lavan heridas y alegran el alma, de risas que despiertan el fuego de la vida, de caricias perdidas y cuerpos que danzan entre el cielo y la tierra, entre la noche y la mañana. Ahí se van ellas, rodeadas de historias, de cansancio, de mugre ajena. Mañana amanecerán tarde, llamarán a alguna amiga para tomar unos mates o se quedarán viendo una película en la TV, mañana se bañarán, se reirán de las penas de hoy, se reirán de sus caprichos de hoy, se reirán de su borrachera, de su ridículo y saldrán a la calle. Como todos los días, a seguir viviendo, a seguir creando, a seguir buscando, a seguir amando. Saldrán quizás a encontrarse con su dios y, como la tristeza no les cuadra, serán como el sol al mediodía, que alumbra y vitaliza todo lo que hay bajo el cielo.

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