Cuaderno de Ideas

Una nota para contribuir al debate... Un debate por hacer...

Los padres de la Iglesia criminalizaron la imaginación, el pensamiento: era pecado pensar esto, imaginar lo otro. Qué terriblemente siniesto, dado lo que se hizo: imaginar placer con alguien, pecado. (No ya hacerlo, claro, sino la otra vuelta de tuerca: pensarlo. Y quién no ha pensado, tras una bronca horrible con un ser querido, e incluso dicho, cosas horribles.)

Pero el arte siempre ha hecho eso, la expresión artística: no hacía, respecto a la violencia, planteaba: que yo sepa esa gente artista no se ha dedicado a matar a nadie. El arte plantea ideas, rompe ideas y mundos y los crea. 

La expresión artística que ejercen muchas mujeres presentando visiones sórdidas del sexo, de los hombres usando el sexo como arma misógina, de los hombres como objeto de una dosis de lo mismo que dan, no es lo mismo que hacerles eso. Es lógico que el arte de mujeres haga a los hombres picadillo, porque es un reflejo de lo que reciben, como grupo. 

Pero el machismo nos enseña además que si la mujer usa metáforas de violencia, como si la ejerciera, eso siempre será más malvado que si la ejerce en hechos el rey de la selva, según los roles de género que nos azotan. (Como mira cómo hablan los hombres cuando debate, los hombres que siguen la tradición diálectica: creyendo que hay que ser despreciativos para indicar inteligencia y capacidad crítica en lugar de centrándose en la argumentación e intentar poner las ideas de la manera que genere menos polarización o guerra, y sí pensamiento y pasos normales, no demenciales).

Los hechos son éstos: las mujeres no se han organizado desde el feminismo para matar a sus opresores. El feminismo como movimiento jamás ha pedido la eliminación o el sometimiento de los hombres. Ahora bien, ¿por qué no iba el arte, la expresión artística, e liberarse al fin para escupir toda la violencia que se ha tenido que tragar? El arte, a diferencia de muchos discursos políticos, a diferencia de muchos eventos de la élite de la Cultura, siempre ha reflejado la vida, los hechos, ahora bien, con su VISIÓN, claro.